Para su tercera colaboración con Netflix, después de House of Cards y Mindhunter (que este año también tendrá su segunda temporada), se ha salido de su terreno habitual y ha incursionado en la animación.
Y para esto contará con la ayuda de Tim Miller, más conocido por haber dirigido la primera película de Deadpool, pero que había iniciado su carrera en Hollywood como artista de efectos especiales, animación y diseño (fue nominado al Oscar por mejor corto animado en 2005).
Anunciada con el título de Love, Death & Robots, la serie es una antología que se describe como «una colección de breves relatos animados que abarcan la ciencia ficción, la fantasía, el horror y la comedia».
La idea que rige el anuncio de Netflix y la descripción de la serie, apoyada en el prestigio de los nombres que vienen asociados a ella, es la de una serie provocadora, arriesgada y revolucionaria, realizada por «creadores de primer nivel».
Netflix asegura que cada historia tiene «un audaz enfoque narrativo» y que todas están diseñadas para que sean «fáciles de ver y difíciles de olvidar». En resumen, se trata de «la primera serie antológica animada que garantiza una experiencia única y visceral».