El ciclista neerlandés Mathieu van der Poel no tomó la salida de la etapa 16 del Tour de Francia, que partía de Montpellier rumbo al mítico Mont Ventoux, debido a una neumonía que lo obliga a poner fin a su participación en la ronda gala. La noticia fue confirmada este martes por su equipo, el Alpecin-Deceuninck, que explicó que el corredor de 30 años comenzó a presentar síntomas preocupantes en los últimos días, los cuales se agravaron durante la jornada de descanso.
Durante la noche del lunes, Van der Poel presentó fiebre, lo que motivó su traslado al hospital de Narbona para ser sometido a pruebas médicas. Los exámenes revelaron una neumonía, diagnóstico que obliga al neerlandés a guardar reposo al menos durante una semana, lo que imposibilita su continuidad en la carrera. Se trata de una dura pérdida para el pelotón, ya que el nieto de la leyenda Raymond Poulidor venía siendo uno de los grandes protagonistas de esta edición.
Van der Poel estaba dando lucha en el Tour de Francia
Ganador de la segunda etapa y portador del maillot amarillo durante cuatro días, Van der Poel también había sido segundo en la cuarta etapa y tercero en la undécima, además de liderar una espectacular escapada en la novena junto a su compañero Jonas Rickaert. Su estilo agresivo y combativo lo había convertido en una de las figuras más destacadas durante la primera mitad del Tour, y se perfilaba como un firme candidato a la victoria en París, especialmente por la exigente llegada a Montmartre.
Con su abandono, el ciclismo pierde a uno de sus corredores más espectaculares y versátiles en esta edición del Tour. Van der Poel llegaba al evento tras una temporada brillante, con triunfos en clásicas como la París-Roubaix y la Milán-San Remo, y su rendimiento en la ronda francesa confirmaba su excelente estado de forma. Ahora, el neerlandés deberá centrarse en su recuperación, con la mirada puesta en volver con fuerza para los próximos desafíos del calendario internacional.