Los recolectores de basura reanudaron este miércoles 19 de febrero sus labores y ya están ingresando al relleno sanitario de la zona 3 capitalina. Esto ocurre tras la masiva protesta que se generó ayer y duró más de 10 horas, situación que paralizó el tránsito en distintos sectores.
Cientos de recolectores de la capital guatemalteca se congregaron el pasado martes desde horas de la mañana frente a las instalaciones del Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales, en la zona 13 capitalina, para exigir la derogación de la nueva normativa sobre la clasificación de desechos, que entró en vigencia el 11 de febrero y la cual consideran perjudicial para su labor y sustento económico.
"No es justo que nos quieran quitar el pan de nuestras familias, somos más de 35 mil familias de recolectores y recicladores que seremos afectados", explicó Rolando Arroyo, un conductor de un camión de desechos, que protestó frente a la sede del Ministerio junto a otras aproximadamente 500 personas.
Rechazo a normativa para separación de desechos
Los recolectores de basura, que prestan servicio a 12 municipios del área metropolitana de Ciudad Guatemala, se declararon en "paro indefinido" hasta que el Gobierno de Guatemala anule el acuerdo gubernativo 164-2021 para la gestión integral de residuos.
Los manifestantes alegan que este reglamento los afecta debido a que obliga a los ciudadanos a clasificar los desechos en sus hogares y las 30 mil personas que viven de reciclar esta basura en el relleno sanitario más grande de la capital quedarán sin posibilidad de ingresos.
El acuerdo gubernativo plantea que desde cada casa se separe de forma adecuada la basura en orgánica, reciclable y no reciclable, para facilitar el reciclaje y la reutilización de materiales. Así como reducir la cantidad de residuos que terminan almacenados en los basureros del país.
El reglamento también obliga a los conductores de los camiones de recolección de basura a estar vacunados contra la hepatitis B y contar con una tarjeta de salud y con un extintor para fuego y generar condiciones sanitarias adecuadas en las instalaciones donde se almacenan los residuos.
