Carlotta Flores, la propietaria del restaurante mexicano El Charro, en Tucson, Arizona, Estados Unidos, quedó sorprendida al recibir una extraña carta de una antigua mesera.
Al restaurante llegó un sobre con una carta escrita a mano y mil dólares.
La carta anónima provenía de una antigua mesera quien confesó haberle robado dinero 20 años atrás y que arrepentida no solo quería pedirle excusas sino compensarla con intereses.
“Trabajé para usted como camarera muy brevemente en la década de 1990, cuando era estudiante en la Universidad de Arizona. Uno de los camareros con los que trabajé me alentó a ‘olvidarme’ de registrar algunas copas por turno y embolsillarme el dinero en efectivo. Y por alguna estúpida razón lo hice”, dice la carta que Carlotta ha hecho pública sin saber quién la envió.
“Han pasado 20 años, pero todavía tengo un gran remordimiento. Lamento mucho haberle robado. Acepte mi disculpa más este dinero como pago + 20 años de interés. Que Dios los bendiga para siempre”, continúa.
En la carta la mujer además confiesa que por fortuna era una camarera terrible, razón por la que el restaurante la despidió a tiempo antes de que sus robos sistemáticos crecieran. “No había robado antes de eso, ni lo he vuelto a hacer”, concluye la carta.
El gesto conmovió a la dueña del restaurante que ha estado históricamente en manos de su familia.
La propietaria del local manifestó que recientemente había tenido que sobrellevar el robo de su cartera.
Aunque Carllotta Flores ha recibido con complacencia la disculpas, asegura que le gustaría saber quién es la mujer.
“No sé dónde está ni quién es, pero le diré una cosa. Espero que la lean o que hayan visto el impacto que esto ha tenido no solo en mí, mi familia, mi empresa, sino a dónde irá en el futuro”, dijo Flores.
Con información de Fox y Univision