Hay una razón por la que el chocolate se denomina “droga del amor”, “droga de la felicidad” y “droga del placer”, y no tiene nada que ver con la comercialización. El chocolate contiene numerosos ingredientes, productos químicos y compuestos que se ha demostrado que afectan el cerebro y el cuerpo de muchas maneras placenteras y positivas. Si bien las pequeñas cantidades de cada químico individual en el chocolate pueden no tener efectos profundos en el cerebro, la combinación de todos ellos empaquetados en una barra práctica, que se ve y sabe muy bien y se siente como un poco de indulgencia, es una combinación ganadora para producir sentimientos felices en el que lo degusta.
El chocolate provoca la liberación de endorfinas en el cerebro, haciéndonos sentir “felices”.
Contiene una serie de compuestos asociados con sustancias químicas que levantan el ánimo en el cerebro. A continuación una serie de términos científicos que al leerlos sonaran confusos, pero aquí te los dejo para que ahora sepas cuales son los compuestos del chocolate.
Empecemos por el mas comun, el azucar. Cuando los azúcares dulces llegan a nuestro paladar, envían un mensaje químico a nuestro cerebro. Esto no solo le dice a nuestro cerebro que acabamos de comer algo dulce, sino que también desencadena la liberación de sustancias químicas normalmente asociadas con la recompensa y el placer. El más conocido de estos es la dopamina, pero hay muchos otros cambios químicos que contribuyen a la sensación placentera que tenemos después de comer cosas dulces. No es de extrañar que lo anhelemos.
A menudo se menciona la feniletilamina, un antidepresivo natural y una de las sustancias químicas que naturalmente produce su cerebro al enamorarse. El triptófano es un aminoácido presente en pequeñas cantidades en el chocolate, está vinculado a la producción de serotonina, el cual es un neurotransmisor que produce sentimientos de felicidad. Un puñado de otras sustancias también se suman a los supuestos efectos del chocolate, por ejemplo, la teobromina la cual puede aumentar la frecuencia cardíaca y no podemos no mencionar la cafeína la cual es bien conocida como un medicamento para “despertarnos”.
La mayoría de estos compuestos están presentes solo en pequeñas cantidades en el chocolate. Ahora otros estudios científicos afirman que estos compuestos en pequeñas cantidades ya se encuentren probablemente completamente digeridos antes de que lleguen al cerebro y por lo tanto todas estas sensaciones solo puedan ser la verdadera experiencia única de comer y degustar el chocolate, satisfaciendo un antojo de comida, lo que naturalmente libera endorfinas y “sentimientos felices” más que el contenido del chocolate en sí.