Brad Pitt ha revelado que pasó un año y medio en rehabilitación para superar un problema con la bebida, después de que su ex esposa, la actriz Angelina Jolie, solicitó el divorcio de él.
Después de que su matrimonio fracasó, Pitt tomó la decisión de dejar de beber. También se unió a un grupo de Alcohólicos Anónimos para discutir su problema con la bebida y otros problemas en la vida, junto con personas que enfrentan una situación similar, reveló el actor en una entrevista a “The New York Times”.
“En verdad fue realmente liberador solo exponer los lados feos de uno mismo. Hay un gran valor en eso”, recordó Pitt en la entrevista.
El actor habló sobre una amplia gama de temas relacionados con su vida personal y profesional. Recordó cómo el resplandor mediático que recibió en sus primeros años parecía demasiado difícil de manejar inicialmente.