La luchadora transgénero, Alana McLauhlin, ha recibido duras críticas luego de su debut en MMA, en el que venció a Celine Provost, reviviendo la polémica sobre la participación de las deportistas trans en las competiciones femeninas.
McLaughlin se impuso a su rival por sumisión (estrangulamiento por la espalda) en poco más de tres minutos, en las preliminares de Global Combat en Miami.
La luchadora estadounidense también es conocida como “The Lady Feral” (Dama Salvaje) y según medios especializados en MMA tuvo muchos problemas para encontrar una rival, y no es para menos, pues McLaughlin, de 38 años, mie 1.82 metros y pesa 90 kilos.
McLaughlin antes de su transición
Previo a su transición a mujer, en 2012, McLaughlin perteneció a las Fuerzas Especiales del ejército de los Estados Unidos entre 2003 y 2010, incluso, sirvió por varios años en Afganistán como sargento y ganó ocho condecoraciones.
Con su debut en Miami, se convirtió en la segunda luchadora transgénero luego de Fallon Fox, en competir de manera profesional de MMA.
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Cabe recordar que Fox causó gran polémica al romper el cráneo a una de sus rivales durante un combate. Su carrera duró de 2012 a 2014 y sostuvo seis enfrentamientos.
Entre los exámenes médicos a los que fue sometida Alana antes de poder pelear había un test hormonal, todo fue aprobado por la Comisión de Boxeo del Estado de Florida.
Después de su triunfo ante la francesa Provost, McLauglin lució una camiseta con el mensaje “end trans genocide” (acabar con el genocidio trans).
“Si queremos ver más atletas trans, si queremos dar más oportunidades a los niños trans, vamos a tener que abrirnos camino en esos espacios y hacerlo realidad”, le dijo a “Outsport”, según el diario “Marca”.
Sin embargo, ha tenido que afrontar cientos de duras críticas, entre ellas las de algunos luchadores profesionales, como Sean Strickland, número 8 en la clasificación de peso medio de la UFC.
“Cambia tu nombre, llámate mujer… pero sigues siendo un maldito hombre, sal de MMA femenina, cobarde”, fue el demoledor mensaje de Strickland.
Mientras que Sean O’Malley también la criticó: Simplemente no creo que eso esté bien, especialmente en MMA. Es como si hubiera tenido testosterona durante, quién sabe, 20 o 30 años de su vida ya hora dice que es una niña. Y mira eso, podrías decir que es un tipo. Una chica secuestrada. Quiero decir, mira esos brazos”.
El productor de podcast de MMA Angel David Castro, dijo: “Alana McLaughlin hizo la transición hace 5 años, lo que significa que vivió 33 años de su vida como hombre. McLaughlin luchó y golpeó a una mujer biológica… qué impacto. Esto no tiene sentido”.
