El Mundial de Futsal 2024, celebrado en Uzbekistán, se ha visto envuelto en una gran controversia tras la denuncia presentada por las selecciones de Libia, Paraguay y Tailandia. Estas federaciones han acusado a las selecciones de Francia e Irán de participar en un presunto “match fixing” (arreglo de partido) durante su encuentro de la fase de grupos, disputado el pasado domingo. La principal razón detrás de la denuncia es la sospecha de que ambas selecciones manipularon el resultado del partido para evitar un enfrentamiento en los octavos de final con Marruecos, una de las selecciones más fuertes y favoritas para alcanzar las últimas rondas del torneo.
El partido en cuestión, que tuvo lugar en la ciudad de Bukhara y correspondía a la tercera y última jornada del grupo F, se disputó entre dos equipos que ya estaban clasificados a la siguiente fase: Francia e Irán. El encuentro culminó con una victoria de Irán por 4-1, pero las circunstancias del desarrollo del juego han levantado muchas sospechas sobre la integridad del resultado.
Les Bleus s’inclinent face à l’Iran dans ce dernier match de groupe 🔚
RDV vendredi pour le 8e de finale contre la Thaïlande 🇹🇭#FutsalWC pic.twitter.com/z2xSopj32B— FFF (@FFF) September 22, 2024
El Mundial de Futsal en el ojo del hurán
Ricardo Íñiguez, seleccionador nacional de Libia, fue uno de los primeros en denunciar el encuentro en redes sociales, calificando lo sucedido como una “vergüenza para el deporte”. En sus declaraciones, Íñiguez aseguró que su federación ya había procedido a interponer una denuncia formal ante la FIFA. Según el seleccionador, el comportamiento de ambos equipos durante el partido sugiere un claro intento de manipulación del marcador para asegurar un cruce más favorable en la siguiente fase.
A la denuncia de Libia se sumaron rápidamente las federaciones de Paraguay y Tailandia, ambas con intereses directos en el desarrollo del torneo. Paraguay, que también competía en la fase de grupos y cuyo futuro en el torneo podría verse afectado por la supuesta manipulación, solicitó a la FIFA que abra una investigación para esclarecer lo sucedido.
Por su parte, Miguel Rodrigo, seleccionador de Tailandia, fue especialmente crítico en sus redes sociales. Rodrigo, un experimentado entrenador con una extensa trayectoria en el futsal internacional, calificó el encuentro entre Francia e Irán como una “deshonra” para el deporte. En su mensaje, afirmó que esperaba con “los brazos abiertos” el enfrentamiento de su equipo contra Francia en los octavos de final, pero dejó claro que el comportamiento de ambos equipos en el partido del domingo había sido indignante.
“Lo que sucedió en Bukhara es una vergüenza para el futsal. Tanto Irán como Francia deshonraron mi deporte, sus entrenadores y jugadores deben asumir la responsabilidad por sus acciones”, escribió Rodrigo.
Las principales sospechas de arreglo de partido surgieron a raíz del desarrollo del juego en sí. Durante la primera mitad del encuentro, Francia no realizó ni un solo tiro a puerta, limitándose a enviar dos disparos completamente desviados. Por otro lado, Irán generó algunas ocasiones, pero ninguna con verdadera intensidad. En la segunda mitad, el nivel de juego se mantuvo sospechosamente bajo, lo que culminó en un error clamoroso del portero francés, Thibaut Garros, quien no pudo detener un disparo aparentemente sencillo de Salar Aghapour, permitiendo el primer gol de Irán.
Este gol generó aún más dudas sobre las intenciones de ambos equipos, pues parecía que las acciones en el campo no correspondían con el nivel competitivo que se espera en un Mundial de esta categoría. La falta de intensidad por parte de los jugadores y los errores garrafales que se cometieron han sido las principales bases de la denuncia presentada por Libia, Paraguay y Tailandia.
El escándalo ha atraído la atención de una de las mayores leyendas del futsal, el portugués Ricardinho. A través de sus redes sociales, el jugador recordó un incidente similar ocurrido en el Mundial de Brasil 2008, cuando Paraguay e Italia fueron acusados de manipular un partido para asegurar su clasificación. Ricardinho señaló que lo ocurrido en Uzbekistán recuerda mucho a aquel episodio, y expresó su frustración por el hecho de que este tipo de situaciones sigan ocurriendo en el deporte.
“Esta situación ya había sucedido en el Mundial de Brasil entre Paraguay e Italia, donde todos vieron lo que pasó para clasificarse a la siguiente fase, y ahora Francia hace lo mismo para evitar rivales más duros. No sé hasta cuándo los atletas aceptarán este tipo de cosas”, comentó el astro portugués.
Já tinha acontecido no mundial do Brasil entre Paraguai e Itália onde se viu aos olhos de todos o que aconteceu para que ambos se apurassem para a seguinte fase, e agora a França faz o mesmo para evitar rivais mais difíceis.
Não sei até quando os atletas vão pactuar com estas…— ricardinho10 (@ricardinho10ofi) September 22, 2024