Una de las versiones sobre la muerte de los tres militares en Semuy II, El Estor, Izabal, es que los soldados fueron "desarmados y asesinados con sus propias armas"; sin embargo, dicha versión queda en duda tras el informe forense.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) los cuerpos fueron llevados a la sede pericial de Puerto Barrios, Izabal, el miércoles pasado y las necropsias concluyeron la madrugada del jueves.
Durante el examen forense, se estableció que lsaias Baleu Caal, de 22 años, César Augusto Leonel Seb Tun, de 30, y Carlos Stven Mayén Cabrera, de 30, fallecieron a consecuencia de heridas producidas por proyectil de arma de fuego de carga múltiple, posiblemente escopeta.
Según el ministro de la Defensa, Luis Ralda, a los militares les quitaron las armas y con las mismas les dispararon; sin embargo, los soldados portaban fusil y no escopeta.
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De acuerdo con el informe de Inacif, todas las muestras recabadas durante el proceso de la necropsia fueron trasladadas a los laboratorios de criminalística del Inacif de la Ciudad de Guatemala, para profundizar la investigación criminal.
El Inacif también esta a la espera de que la fiscalía remita indicios que fueron recolectados en el sitio del incidente, para la realización del análisis forense.
