La congresista estadounidense Norma Torres dio a conocer en sus redes sociales oficiales que visitó la frontera Sur de Estados Unidos “para hablar con migrantes que huían de sus países para tener la oportunidad de vivir otro día”. Se trata de un albergue de menores no acompañados.
“Muchos están escapando de narcogobiernos liderados por Nayib Bukele, Juan Orlando Hernández y Alejandro Giammattei”, añadió en su mensaje.
Viaja a frontera
Por otro lado, la política originaria de Guatemala mencionó que estas familias que se encuentran emigrando hacia Estados Unidos, principalmente, “merecen un verdadero liderazgo y compasión”.
“Esta mañana voy para Carrizo Springs, Texas, para investigar las condiciones en que se encuentran los niños que viajan solos para la frontera de Estados Unidos”, mencionó en un mensaje grabado en video que adjuntó en un tuit.
Además, volvió a recalcar que se trata de una “crisis creada por el narcogobierno y líderes corruptos y fallados” de Guatemala y El Salvador, según mencionó.
Visité la #FronteraSur para hablar con migrantes que huían de sus países para tener la oportunidad de vivir otro día. Muchos están escapando de #narcogobiernos liderados por @nayibbukele, @JuanOrlandoH y @DrGiammattei. Estas familias merecen un verdadero liderazgo y compasión. pic.twitter.com/OClxaNW9my
— Rep. Norma Torres (@NormaJTorres) March 24, 2021
Menores no acompañados
El lugar a donde se dirigió Torres cuenta con un centro de acogida temporal que fue reabierto a inicios de este mes ante el aumento de migrantes menores no acompañados en la frontera sur de Estados Unidos.
La instalación estaba inicialmente destinada a albergar a trabajadores petroleros y fue utilizada para alojar a jóvenes migrantes en julio de 2019, durante el mandato del expresidente de Donald Trump.
Ante el “creciente número” de niños no acompañados, así como las restricciones en las estructuras debido a la pandemia de coronavirus, el gobierno de Biden reabrió las instalaciones el 22 de febrero.
Hasta el martes, 214 adolescentes de entre 13 y 17 años vivían allí, dijo en un comunicado el departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS, por su sigla en inglés).
La apertura de estas instalaciones, con capacidad para albergar a 700 personas, preocupa entre los activistas y las organizaciones de derechos de los inmigrantes.
“El centro de detención de Carrizo Springs no puede convertirse en el statu quo para los niños”, dijo Amnistía Internacional.
* Con información de AFP.