Integrantes de la comunidad Lev Tahor se hizo presente este viernes 17 de enero a las fueras del Palacio Nacional de la Cultura, en la zona 1 de la Ciudad de Guatemala, donde se lleva a cabo una reunión entre el presidente Bernardo Arévalo y el cuerpo diplomático acreditado en el país.
Los líderes del grupo explicaron que acudieron a este punto con el fin de poder tener contacto con las autoridades del Gobierno, específicamente buscan reunirse con el mandatario o la vicepresidenta Karin Herrera.
Portando pancartas y utilizando megáfonos para pronunciarse, estas personas exigieron que cese la "persecución injusta" en su contra y aseguraron que los señalamientos que se han hecho en las últimas semanas contra este grupo son resultado de denuncias falsas.
Expusieron que las acusaciones de cuatro jóvenes que abandonaron la comunidad carecen de veracidad y que incluso uno de ellos testificó que fue sobornado con dinero y promesas de viajes para "declarar mentiras". Asimismo, señaló que el joven detenido en El Salvador es inocente.
Indicaron además que el 15 de enero, más de 500 agentes separaron violentamente a madres de sus hijos, incluidos recién nacidos, causando un "sufrimiento indescriptible", lo que describieron como un "abuso inhumano". También manifestaron que ayer hubo otro allanamiento violento en el que se secuestró a un joven con autismo, bajo la falsa acusación de explotación laboral.
En ese contexto, hicieron un llamado a que se haga justicia y se termine con lo que calificaron como violencia y persecución.
"Pedimos la solidaridad del pueblo guatemalteco para que nos ayuden a recuperar a nuestros hijos. Exigimos que cese este ataque inhumano y que el gobierno detenga esta persecución injusta. Necesitamos su apoyo para detener este sufrimiento",
dijeron a través de un comunicado.