La Fundación Tigo dio a conocer el programa “Enseñanza Tecnológica” con el propósito de promover el uso responsable de las redes sociales e Internet.
¿De que se trata “Enseñanza Tecnológica”?
Se busca promover a través del fortalecimiento de la comunidad educativa, docentes y padres de familia en temas de protección y acompañamiento en la vida digital de niños y niñas en Guatemala.
El propósito del programa es sensibilizar acerca de la importancia del rol de los adultos en el acompañamiento y guía que los menores de edad deben tener al utilizar redes sociales e Internet.
El programa se basa en cuatro pilares fundamentales: proteger, orientar, inspirar y empoderar.
“Para Tigo es muy importante proporcionar las herramientas adecuadas para que todos puedan tener una navegación segura, especialmente la niñez. Es uno de los temas más relevantes de nuestra responsabilidad social empresarial, ya que está directamente relacionado con el consumo de nuestros servicios y productos”, comentó Melanie Reimers Directora de Fundación Tigo.
La primer fase del proyecto inicio en el 2017, en la que se capacitó a 771 maestros de 229 escuelas, quienes transfirieron los conocimientos a sus alumnos, impactando alrededor de 20 mil estudiantes de primaria.
Mario Leal, Gerente de Educación de Fundación Tigo, agregó: “Nuestra meta en el 2018 es implementar la segunda fase del programa Enseñanza Tecnológica, con los nuevos materiales educativos y dinámicos de talleres, en las escuelas ABC Digital de Fundación Tigo y capacitar a 150 docentes, que a su vez replicarán el contenido con más de 3,500 estudiantes. De igual forma, para 2019 buscamos llegar a 1,000 docentes para impactar directamente a más de 25,000 estudiantes. Agradecemos al Ministerio de Educación por su apoyo para la ejecución del proyecto”.
El programa “Enseñanza Tecnológica” fue desarrollado con base en el programa “Crianza Tecnológica”, creado para Tigo por Fundación Paniamor en Costa Rica, y para implementarlo en Guatemala, Fundación Tigo desarrolló una estrategia para adaptar los contenidos con el apoyo de pedagogos, y la Universidad del Valle de Guatemala.
Fotos: Ana Motta
