Durante más de cien años, los niños y los adultos se han quedado perplejos por un disco en blanco y negro muy especial que cambia de color cuando gira. A veces rojo, azul, amarillo, verde o violeta, esta ilusión óptica demuestra que la ciencia de la visión no siempre es en blanco y negro.
Pintar con todos los colores de la rueda
La ilusión de Benham’s Top (o Benham’s Disk) ha existido por un tiempo. En 1894, el Sr. C.E. Benham vendió su disco especial con los Sres. Newton and Co. como un juguete para niños. La mitad del disco estaba pintada de negro, mientras que la otra mitad tenía un fondo blanco y 12 arcos concéntricos de 45 grados dibujados sobre él. El lado blanco estaba dividido en cuadrantes, con tres arcos concéntricos en cada uno. Gira el disco y aparecerán colores en los círculos. Cambian según la velocidad y la dirección, pero una fotografía no puede capturarlos.
Incluso hace tantos años, la forma y los ángulos del disco eran extremadamente precisos. Y, sin embargo, parece que nadie sabía realmente cómo funcionaba la ilusión. Como decía el primer anuncio del dispositivo en la revista Nature, “La causa de estas apariencias no parece haber sido resuelta exactamente”. La ilusión todavía nos cautiva hoy; solo puedes imaginar lo mágico que hubiera sido en 1894.
Benham parece haber sido el mejor en comercializar la ilusión como un juguete, pero no fue el primero en notar su existencia. Años antes de que el “Benham’s Top” llegara a las estanterías, Gustav Fechner y Hermann von Helmholtz descubrieron que los discos giratorios en blanco y negro podían hacer aparecer los colores. Esos colores se han denominado “colores subjetivos”, “colores Fechner-Benham”, “colores Prevost-Fechner-Benham”, “colores polifanos” y “colores parpadeantes inducidos por patrones” (PIFC). Algunos nombres son más pegadizos que otros.
Todavía no sabemos realmente cómo funciona la ilusión del disco de Benham. Pero los científicos tienen teorías basadas en cómo sabemos que el ojo percibe imágenes. Lo más importante que debemos saber es que nuestra retina tiene dos tipos de receptores que procesan la luz: conos y bastones. Los conos permiten la visión del color y la visión con luz brillante. Las barras nos ayudan a ver con poca luz, y perciben las cosas en monocromo. Hay tres tipos diferentes de conos: uno que es sensible al azul, uno para el verde y otro para el rojo. Los conos responden a diferentes velocidades y durante diferentes períodos de tiempo. El cono azul tarda mucho en responder, pero permanece activo durante más tiempo que el verde y el rojo.
Es posible que el disco giratorio de Benham active diferentes conos y varillas en patrones alternos. Cuando observamos un solo punto en el disco, vemos destellos blancos (activando todos los conos en nuestra retina) y destellos negros (activando las varillas). Debido a que algunos conos responden más rápido que otros y los destellos siguen volando, el ojo procesa los destellos como colores diferentes.
El Disco de Benham muestra cómo nuestra percepción visual no es tan simple como pensamos, y nuestros ojos son más fáciles de engañar de lo que imaginamos.