El piloto del picop que se accidentó el pasado miércoles en la aldea Conacaste, Jocotán, departamento de Chiquimula, deberá comparecer ante las autoridades de justicia, tomando en cuenta que este hecho dejó como saldo 17 personas fallecidas y 13 heridas.
La audiencia de primera declaración de Arnoldo Guerra Nufio, de 23 años, quedó programada para el lunes, 10 de octubre, y se desarrollará en un juzgado de la referida localidad.
Esta persona fue capturada horas después de que se registró el incidente vial. La Policía Nacional Civil lo trasladó a la judicatura correspondiente donde se le hizo saber el motivo de su aprehensión. Actualmente permanece con arresto domiciliario, mientras se define su situación.
#EUNacionales Un picop cayó a un barranco y 17 personas murieron. Entre las víctimas hay dos menores.https://t.co/3jg7qop4ov
— Emisoras Unidas (@EmisorasUnidas) October 6, 2022
Accidente en Jocotán
El accidente ocurrió en la madrugada del miércoles en el momento en que el piloto del picop estacionó en una cuesta para que abordaran más pasajeros, pero el vehículo rodó hasta el barranco, de acuerdo con la versión de testigos.
Las víctimas viajaban apretujadas en la parte trasera de la camioneta desde la comunidad al centro urbano de Jocotán para recibir una “transferencia” monetaria de un proyecto del Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la ONU, dijo el alcalde municipal del lugar, Ramón Díaz.
Los 17 féretros fueron velados en la escuela local, que también funcionó como una morgue improvisada donde las autoridades prepararon los cadáveres.
Las víctimas fueron despedidas un día después. Las canciones cristianas sonaron mientras los pobladores cargaban en procesión los ataúdes y se dirigían hacia el cementerio local. “Yo te extrañaré, tenlo por seguro…” decía uno de los cánticos reproducido en una bocina.
“Es un dolor muy grande, es muy triste para mí”, comentó Celso Suchité, de 48 años, quien perdió en el percance a seis primos y sobrinos.
“¿Pero qué puedo hacer? Allí sí no puedo [hacer nada] ante lo que haga Dios”, agregó Celso resignado en esta comunidad de agricultores de maíz y frijol, a la que se asciende por un estrecho paso de montaña rodeado de acantilados.