Magnus Carlsen, el reconocido ajedrecista noruego y campeón mundial de ajedrez rápido, se ha visto envuelto en una nueva controversia con la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE). En esta ocasión, Carlsen abandonó la actual edición del Mundial de Rápidas que se celebra en Nueva York, luego de que se le prohibiera participar en la novena ronda por negarse a cambiar sus pantalones vaqueros, lo que violaba el código de vestimenta del torneo.
El incidente ocurrió cuando el árbitro jefe del evento sancionó a Carlsen con una multa de 200 euros y le indicó que debía cambiarse de ropa para continuar compitiendo. Carlsen, quien no estaba satisfecho con su rendimiento y ocupaba la posición 41 en la tabla, optó por no acatar la orden y, en consecuencia, fue excluido de la ronda. Esta decisión marcó el final de su participación en el torneo.
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— Magnus Carlsen (@MagnusCarlsen) December 28, 2024
¿Qué pasará con Magnus Carlsen?
El noruego explicó su versión de los hechos a través de su canal ‘Take take take’. Según Carlsen, había tenido un día complicado y, aunque hizo un esfuerzo por vestirse adecuadamente con una camisa, chaqueta y zapatos formales, no consideró que los vaqueros fueran un problema. Afirmó que no tenía intención de desafiar las reglas, pero que el momento de la solicitud lo tomó por sorpresa y lo consideró una cuestión de principios.
Por su parte, la FIDE defendió su decisión mediante un comunicado oficial, señalando que Carlsen había violado de manera clara el código de vestimenta, el cual está vigente desde hace años y es conocido por todos los participantes. Además, explicaron que el día del incidente otro ajedrecista destacado, Ian Nepomniachtchi, también fue multado por usar calzado inadecuado. A diferencia de Carlsen, Nepomniachtchi aceptó la sanción y continuó compitiendo tras corregir su vestimenta.
"FUCK YOU" @MagnusCarlsen is out. pic.twitter.com/3QWZtBHCPL
— Take Take Take (@TakeTakeTakeApp) December 27, 2024
La relación tensa entre Carlsen y la FIDE no es nueva. El noruego ha evitado participar en los últimos dos Mundiales de ajedrez clásico, una modalidad en la que ha sido campeón cinco veces, debido a su desacuerdo con las reglas del torneo. Además, ha expresado su frustración con la federación por su postura frente al ajedrez 'freestyle', una modalidad en la que las posiciones iniciales de las piezas se sortean antes de cada partida.
Carlsen criticó duramente a la FIDE, alegando que están presionando a los jugadores para que no participen en torneos de ajedrez 'freestyle' bajo amenaza de ser excluidos de los ciclos del campeonato mundial. "Mi paciencia con ellos no era grande, y esto solo refuerza mi decisión de apartarme", declaró.
La FIDE, a través de su CEO Emil Sutovsky, rechazó estas acusaciones, afirmando que no se ha amenazado a ningún jugador y que la federación está dispuesta a colaborar con diferentes torneos y formatos. Sutovsky subrayó que la FIDE es la entidad que regula el ajedrez a nivel mundial y que ningún torneo puede ser considerado un Campeonato Mundial sin su aprobación.
