Desde que tomó el control en la Federación de Futbol de Guatemala (FFG), antes Fedefut, Gerardo Paiz se ha inclinado por el talento mexicano, no solo para dirigir los procesos de Selecciones Nacionales de Guatemala, sino también el tema arbitral.
José Luis Camargo, un exárbitro línea mexicano, se hizo cargo del tema arbitral, y llevó al referato nacional a la peor crisis que se recuerde. Su puesto quedó vacante tras la decisión de la FFG de retirarlo del cargo.
Su lugar, será ocupado por otro talento mexicano, el exárbitro internacional y analista arbitral, Felipe Ramos Rizo.
Pese a que la Federación de Futbol de Guatemala no ha hecho el anuncio oficial, días atrás Paiz dio a conocer que el mexicano Ramos sería sustituto en el cargo de su compatriota Camargo. Pero el lunes en horas de la noche a través de sus redes sociales, el analista arbitral de ESPN publicó un mensaje que lo acerca al país, su próxima casa de trabajo.
Con una simple palabra: "Vámonos", la cual fue acompañada por el nuevo logotipo de la FFG, así anunció Felipe Ramos Rizo que estará en Guatemala haciéndose cargo de la asesoría arbitral.
Con este rol, al frente de la Comisión de Árbitros de la FFG, Felipe Ramos Rizo buscará implementar un sistema de formación sólido, aprovechando su experiencia como fundador del Colegio de Árbitros Ramos Rizo en México, que capacita a más de 100 árbitros activos.
Una carrera loable
"Felipe Ramos Rizo, deja temporalmente su rol como analista de televisión en la cadena ESPN, para llevar su vasta experiencia a Centroamérica, para compartir su conocimiento y liderar un proyecto que busca profesionalizar a los silbantes guatemaltecos", informaron los medios mexicanos que han dado cobertura a esta noticia.
Ramos Rizo es uno de los árbitros más emblemáticos de México, su trayectoria incluye haber dirigido tres partidos en la Copa del Mundo de la FIFA de 2002 en Corea y Japón, así como la final de los Juegos Olímpicos de Sídney 2000, siendo el primer árbitro de la Concacaf en lograrlo, recuerda Estadio Deportes.
Además, pitó siete finales consecutivas en la Primera División de México, dos Copas Oro, dos Copas Uncaf (1999-2003), la final de la Copa del Caribe (1998), la Copa del Mundo Sub-20 en Nigeria (1999) y eliminatorias en Asia, Conmebol y Concacaf en 2001, consolidándose como uno de los mejores árbitros del mundo en su momento, añadió el medio digital.
