Polo Morín y Lambda García vivieron un intenso romance que inició en 2017, al principio decidieron mantenerlo en privado; sin embargo, un hacker los obligó a salir del clóset hacer público su noviazgo.
Desde ese momento, ambos compartieron numerosos momentos juntos en redes sociales, emocionando a sus seguidores.
Lamentablemente, la felicidad no duró mucho, ya que dos años después la relación llegó a su fin en medio de rumores de infidelidad.

Fue Polo Morín quien anunció la separación a través de sus redes sociales, lo que generó especulaciones sobre los motivos de la ruptura.
Con el tiempo, se confirmó que Lambda García había sido infiel, lo que dejó una profunda huella en Polo Morín.
Lambda García -de 38 años de edad- le rompió el corazón a Polo Morín -de 34 años de edad, quien tuvo que pedir ayuda a su mamá para salir de una fuerte depresión.
A su paso por el podcast de Roberto Carlo -de 38 años de edad-, Polo Morín recordó haber sufrido mucho cuando terminó su noviazgo con Lambda García.
Los detalles
Polo Morín confesó que la ruptura lo afectó profundamente, llevándolo a una crisis emocional tan severa que incluso pensó en quitarse la vida.
"Cuando corté con él, me llevó la fregada. Me puse muy mal, me deprimí muchísimo", reveló el actor.
La situación se tornó tan complicada que recurrió a su madre en busca de apoyo. Con profunda tristeza, recordó el momento en que la llamó desesperado:
"Le hablé a mi mamá como niño chiquito de ‘mami’. Le dije: ‘Por favor, vente conmigo porque no estoy pudiendo, ya no quiero estar en esta vida’. En mi cabeza era, me están dejando por alguien más. Mi mamá me limpiaba las lágrimas. Me llevaron a un psiquiatra".

El especialista le explicó que había desarrollado una fuerte codependencia emocional con Lambda García, lo que agravó su estado anímico.
Polo Morín también reconoció que, a pesar de su fama y de estar rodeado de muchas personas, no contaba con verdaderos amigos a quienes pudiera confiarle sus emociones.
Aunque siempre tenía compañía para salir de fiesta, sentía un vacío emocional enorme.
"Cuando eres una persona frágil y no tienes cimientos, te caes. Fue lo que pasó con mi ex. En ese momento sentía que no tenía amigos. Tenía miles, pero solo los que se quieren ir de fiesta, no había nadie a quien yo sintiera y decirle: ‘No puedo parar de llorar’", confesó.
Hoy en día mantiene una relación con el nadador mexicano Bernardo Abascal, con quien ha construido un vínculo basado en el respeto y el amor mutuo.