Los cuerpos de socorro le dieron seguimiento a una emergencia que se reportó en áreas de la Ciudad de Guatemala, que abarcan las zonas 11, 12 y 13. Desde horas de la noche del miércoles 5 de febrero, los vecinos reportaban olores tóxicos en el ambiente que incluso les generaron problemas en el sistema respiratorio.
El personal de la brigada de rescate "Sección de Materiales Peligrosos" de los Bomberos Voluntarios, bajo instrucciones del primer comandante, Mayor Giovanni Cordón, miembros del directorio y jefatura general de servicios, se hicieron presentes a los puntos afectados.
"Se hizo una evaluación en el ambiente tanto interna como externa, utilizando un medidor de atmósfera como parte del equipo de tecnología de la sección", explicó Leandro Amado, vocero de la institución.
Añadió que, tras avanzar en las tareas de reconocimiento, se realizó la localización de una posible fuga de gas en la colonia Miles Rock, zona 13. En este sector continuaron las labores esta mañana para evitar riesgos para la población.
Evacuan a familias por posible presencia de elementos tóxicos
Los Bomberos Municipales y la Cruz Roja Guatemalteca también participaron en los procedimientos de respuesta a la alerta por posibles elementos tóxicos. En ese sentido, el personal apoyó en la evacuación de aproximadamente 50 familias en las áreas afectadas.
Los vecinos fueron trasladados a una colonia aledaña, donde fueron atendidos, especialmente las personas de la tercera edad ya que presentaban problemas respiratorios.
En total, se brindó atención pre hospitalaria a cuatro personas, quienes fueron estabilizadas en el lugar, no ameritando su traslado a algún centro asistencial.
Conred explica acciones
Al respecto de esta emergencia, la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) informó que, como parte de las acciones de respuesta ante el reporte de vecinos sobre un olor desconocido proveniente del alcantarillado se procedió a instalar un puesto de comando.
El sistema Conred informó que no los vecinos describían olores similares a los del combustible, por lo que llevaron a cabo el trabajo de campo correspondiente; sin embargo, no detectaron el posible origen, por lo que procedieron a rociar agua en las tuberías.
"Luego de los estudios, se logró descartar la toxicidad del ambiente, a través de un análisis de muestreo para materiales químicos. Entonces, se procedió a la descarga de agua en el alcantarillado, con lo cual el olor queda disipado", señaló el Departamento de Comunicación Social de la institución.
* Con información de Juan Carlos Chanta, Emisoras Unidas 89.7
