A criterio de Dirk Bornschein, de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso), las remesas que llegan de Estados Unidos (EE.UU.) a Guatemala “no son invertidas de la mejor manera por parte de las personas que las reciben”.
De acuerdo con Bornschein, la mayoría de guatemaltecos utilizan las remesas para su consumo, mejorar su casa, entre otros, pero no para proyectos de productividad que podrían ayudarlos en el futuro.
Sin embargo, afirmó que lo anterior se debe a la falta de apoyo de parte del Estado de Guatemala, para vincular las remesas en proyectos y programas de productividad.