Una nueva jornada de protestas se dio este martes 1 de agosto en las afueras de la sede del Ministerio Público (MP), en la zona 1 capitalina, Barrio Gerona. Esto se da en el marco de la crisis electoral que se vive en el país.
Los manifestantes portaban pancartas con mensajes en los cuales exigían respeto al Estado de Derecho y llamaban a la ciudadanía a sumarse para defender la democracia. Además, colocaron moños morados en las rejas instaladas en el perímetro de la fiscalía.
Las peticiones se enfocan en que se respete el proceso electoral y que renuncien la fiscal general y jefa del MP, Consuelo Porras; del jefe de la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI), Rafael Curruchiche; y el juez Freddy Orellana.
Según detallaron, en el país se están dando campañas de desinformación sobre la agenda 2030 y el comunismo, discursos de odio, explotación de las tierras, entre otros.
En ese contexto, aseguraron que respaldan al TSE para que cumpla con lo establecido en la Ley Electoral y de Partidos Políticos y demás leyes, garantizando llevar a buen término las elecciones generales 2023.
Manifestaciones ciudadanas
Cientos de guatemaltecos marcharon el pasado domingo 23 de julio con flores en el centro de la capital para exigir la renuncia de funcionarios judiciales señalados de generar una crisis electoral al accionar contra un partido que competirá en el balotaje del 20 de agosto.
Los manifestantes pidieron la dimisión de la fiscal general Consuelo Porras, luego de que su institución pidió la cancelación del partido Semilla de uno de los contendientes del balotaje, el socialdemócrata Bernardo Arévalo.
“Ha habido una serie de acciones legales espurias con el objeto de dejar sin efecto los resultados del 25 de junio (primera vuelta)”, dijo a la AFP la líder maya Alida Vicente.
“Fuera los corruptos, estamos hartos”, coreó otro grupo en la marcha.
En la manifestación también pidieron la renuncia del juez Fredy Orellana y del fiscal Rafael Curruchiche, que junto a Porras están sancionados por Estados Unidos que los considera actores “corruptos y antidemocráticos”.
Orellana ordenó al Tribunal Supremo Electoral (TSE) suspender a Semilla a pedido de Curruchiche, quien argumenta anomalías en la creación del partido en 2017, medida que no acató el ente porque por ley ningún partido puede ser anulado en medio de un proceso electoral.