El escenario era crucial para el Liverpool: enfrentarse a su máximo rival, el Everton, en Goodison Park, con la necesidad imperiosa de sumar tres puntos para mantener viva la esperanza de competir por el título de la Premier League. Sin embargo, lo que se presentaba como una oportunidad para presionar al Manchester City y al Arsenal se convirtió en una dolorosa derrota que prácticamente sepultó sus posibilidades de conquistar el campeonato.
El equipo de Jürgen Klopp se encontraba en una situación en la que requería de un verdadero milagro: que tanto el Manchester City como el Arsenal tropezaran en múltiples ocasiones para tener alguna opción de alcanzar el tan ansiado título. Lo que en algún momento se vislumbraba como un posible regalo de despedida para Klopp, en forma de un cuarto título de la Premier League, ahora se reduce a una mínima esperanza, pendiendo de los posibles tropiezos de sus rivales directos.
What a win for @Everton! 🔵
They emerge victorious against Liverpool in the Merseyside derby! pic.twitter.com/WOUdvRvez4
— Premier League (@premierleague) April 24, 2024
Everton gana el ‘Derby’ ante el Liverpool
El enfrentamiento contra el Everton, históricamente, no era visto como uno de los más complicados para el Liverpool, especialmente bajo la dirección de Klopp. Sin embargo, en esta ocasión, las circunstancias se presentaban distintas: un encuentro sin público debido a la pandemia, y la presencia de Carlo Ancelotti en el banquillo del Everton. A pesar de esto, el Liverpool no logró desplegar su mejor juego desde el inicio del partido.
El primer indicio de que no sería una jornada sencilla para los ‘Reds’ fue el penalti concedido a favor del Everton, tras una falta de Alisson sobre Dominic Calvert-Lewin, aunque finalmente fue anulado por fuera de juego del delantero inglés, gracias a la intervención del VAR. Sin embargo, este contratiempo no fue más que el preludio de una serie de eventos desafortunados para el Liverpool en Goodison Park.
El Everton se adelantó en el marcador de una manera peculiar, con un gol que parecía salido del manual de Sean Dyche. Una jugada confusa que comenzó con un tiro libre, desembocó en un despeje errático de la defensa del Liverpool, permitiendo a Branthwaite, el central del Everton, rematar a puerta prácticamente sin oposición. A pesar del esfuerzo de Alisson por evitar el gol, el balón logró cruzar la línea de gol, sumiendo al Liverpool en una situación aún más complicada.
La suerte tampoco estuvo del lado del Liverpool en las oportunidades de gol que tuvieron a continuación. Tres ocasiones claras desperdiciadas, primero por Darwin, luego por Mohamed Salah, quien ha mostrado una preocupante falta de efectividad en las últimas semanas, y finalmente por Luis Díaz, quien no logró capitalizar una jugada generada por Salah y Darwin.
En la segunda mitad, el Everton sentenció el encuentro con otro gol, esta vez aprovechando un córner, una de las especialidades del equipo de Dyche. Calvert-Lewin remató sin marca en el segundo palo, dejando al Liverpool prácticamente sin opciones de remontada.
Con este resultado, el Liverpool prácticamente se despide de sus aspiraciones por el título de la Premier League, dejando la lucha por el campeonato en manos del Manchester City y el Arsenal. Para el Everton, la victoria no solo significa un triunfo sobre su eterno rival, sino también un importante impulso en su lucha por mantenerse alejado de la zona de descenso.
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