El presidente saliente de Estados Unidos (EE. UU.), Joe Biden, decidió no implementar una prohibición de la red social TikTok que estaba programada para entrar en vigor un día antes de finalizar su mandato, según información de diversas agencias internacionales de noticias. La medida, originalmente establecida para el 19 de enero, será delegada al presidente electo Donald Trump, según informó un funcionario del gobierno federal.
El Congreso había aprobado una ley, firmada por Biden el año pasado, que exigía a ByteDance, la empresa matriz de TikTok con sede en China, desvincularse de la plataforma antes de la fecha límite. Sin embargo, Trump, quien en el pasado abogó por prohibir la aplicación, ahora parece estar buscando alternativas para mantenerla operativa en el país.
El representante Mike Waltz, designado como asesor de seguridad nacional por Trump, señaló que se están considerando opciones para evitar que TikTok sea prohibido. Durante una entrevista en Fox News, Waltz mencionó que la ley permite una extensión del plazo si se presenta un acuerdo viable para transferir el control de la aplicación a una empresa estadounidense.
Intentos por salvar TikTok en EE. UU.
Mientras tanto, el líder demócrata en el Senado, Chuck Schumer, instó a Biden a extender el plazo para evitar la interrupción en las vidas de millones de usuarios y creadores de contenido. Sin embargo, el senador republicano Tom Cotton bloqueó un proyecto de ley que buscaba otorgar más tiempo, argumentando que ByteDance ya tuvo suficiente oportunidad para vender TikTok.
Cotton reiteró sus preocupaciones sobre la seguridad nacional, describiendo a TikTok como "una herramienta del Partido Comunista Chino" que recopila datos sensibles de los usuarios y difunde contenido manipulador.
En un giro curioso, se espera que el CEO de TikTok, Shou Zi Chew, asista a la toma de posesión de Trump junto a otros gigantes tecnológicos como Elon Musk, Mark Zuckerberg y Jeff Bezos. Esto sugiere un posible intento de acercamiento entre ByteDance y la nueva administración para llegar a un acuerdo que permita la permanencia de TikTok en el mercado estadounidense.
Por su parte, Trump ha suavizado su postura sobre la aplicación. Durante su campaña presidencial de 2024, utilizó TikTok como una herramienta clave para conectar con votantes jóvenes, atribuyendo parte de su éxito electoral a la plataforma. Ahora, se enfrenta a la decisión de garantizar la seguridad de los datos de los usuarios estadounidenses mientras busca mantener TikTok como un canal de influencia política y social.
El futuro de TikTok en Estados Unidos podría definirse en los próximos días, dependiendo de las acciones que tome la administración de Trump y del fallo de la Corte Suprema sobre la legalidad de la ley que amenaza con prohibir la popular aplicación.