En el marco del Día Internacional contra el Estigma y la Discriminación por Orientación Sexual e Identidad de Género, que se conmemora cada 17 de mayo, organizaciones en Guatemala denunciaron una escalada de homicidios contra personas de la diversidad.
Los integrantes de las agrupaciones LGBT brindaron una conferencia de prensa en la que revelaron que en el período de 2017 a 2025 fueron asesinadas 120 personas. En ese contexto, hicieron un llamado a las autoridades para promover políticas que permitan hacerle frente a esta situación.
Solo en el presente año, según sus registros, al menos cinco personas han perdido la vida en hechos de violencia por discriminación por diversidad sexual y de género. Los crímenes ocurrieron en los departamentos de San Marcos, Escuintla, Izabal y Guatemala.
Expusieron que el caso más reciente se presentó en un sector de San Pablo, San Marcos, donde Yaquelyn Sánchez fue secuestrada y posteriormente su cuerpo fue localizado con señales de violencia y calcinado.
"Las mujeres trans organizadas desde los territorios alzamos nuestras voces para visibilizar la violencia estructural que enfrentamos y exigir respuestas urgentes del Estado. El estigma y la discriminación no son ideas abstractas: son condiciones que nos impiden vivir con dignidad, acceder a derechos fundamentales y desarrollarnos en libertad", expresaron.
Se informó que el Centro de Documentación y Situación Trans de América Latina y el Caribe (CeDoSTALC), documentados por Otrans-RN, en el presente año ha registrado 39 violaciones a derechos humanos contra personas trans, distribuidas de la siguiente manera:
- 5 asesinatos por odio que evidencian que los crímenes trasfóbicos siguen arrebatándonos vidas.
- 34 casos de violaciones a derechos humanos, entre ellos:
- 22 casos de discriminación por diversas causas.
- 4 casos por negligencia en servicios de salud.
- 7 casos por violaciones al derecho al trabajo.
- 1 caso de violencia o abuso sexual.
Exigen reconocimiento a identidades de género
Las organizaciones guatemaltecas indicaron que la exlusión institucional que ha persistido durante años produce estigma, legitima la violencia y perpetúa la impunidad.
"Estas violencias no son aisladas: son parte de una política de exclusión. El Estado guatemalteco sigue negando el reconocimiento legal de nuestras identidades de género, y nuestras comunidades siguen estando fuera de leyes, programas sociales y políticas públicas", expresaron.
En ese sentido, exigieron el reconocimiento legal pleno de sus identidades de género. Al igual que la creación de políticas públicas inclusivas con participación real de sus comunidades y recursos asignados.
También pdieron acceso digno e igualitario a salud, educación, trabajo y justicia, sumado a reparación por los crímenes de odio cometidos con sus "hermanas y compañeras".
Estos planteamientos surgen principalmente porque, según afirmaron, han observado atención inadecuada por parte de las fuerzas de seguridad ante estos casos. Además, expusieron que consideraron que los casos que se han presentado ante la fiscalía on archivados y prácticamente quedan en el olvido.
* Con información de Omar Solís, Emisoras Unidas Digital.
