Una mujer de 32 años, identificada como Lauren Ingrid Flanigan, es acusada del asesinato de su hija de tres años, cuyo cuerpo fue hallado el lunes 26 de mayo en una residencia de Moore Park Beach, en el estado de Queensland, Australia. El caso ha conmocionado a la comunidad local y ha generado atención internacional tras revelarse publicaciones en redes sociales que muestran un comportamiento preocupante en los días previos al crimen.
De acuerdo con las autoridades, la policía respondió a múltiples llamadas de emergencia la tarde del lunes. Al llegar al lugar, encontraron el cuerpo de la menor sin vida junto con su madre, ambos en el patio delantero de la vivienda. El superintendente interino Brad Inskip calificó la escena como "horrible" y "terrible" para todos los involucrados. En el lugar fue incautado un cuchillo, que presuntamente habría sido utilizado en el ataque.
Flanigan no se presentó a su primera comparecencia ante el tribunal, y su caso ha sido aplazado hasta el mes de julio. Según el informe policial, otros dos menores se encontraban en la residencia en el momento del incidente, pero resultaron ilesos y han sido puestos bajo el cuidado de familiares.
Aunque la policía no ha confirmado oficialmente si la mujer padecía de alguna condición de salud mental, se reportó que, antes del crimen, habría gritado algo relacionado con una "orden divina", lo cual ha alimentado la especulación sobre su estado psicológico. El superintendente Inskip se abstuvo de confirmar ese dato durante la conferencia de prensa.
Actividad en redes sociales: mensajes crípticos y retórica beligerante
Tras su arresto, salieron a la luz varias publicaciones realizadas por Flanigan en redes sociales en los días previos al crimen. En ellas, la mujer se describía a sí misma como una "guerrera de la luz" y afirmaba entrenar "como si fuera la guerra". También llamaba a sus seguidores a "recordar quiénes son", a considerarse "realeza", "elegidos" y "santos", en lo que parecía un discurso cargado de retórica mesiánica.
En una publicación hecha apenas dos días antes del asesinato, instaba a su audiencia a "etiquetar a sus generales" y "ALZARSE", lo que algunos usuarios han interpretado como un llamado a la acción con connotaciones ideológicas o espirituales. En sus perfiles, se presentaba como promotora de bienestar, libertad financiera y estrategias digitales para mujeres, usando frases como: "Fe. Familia. Futuro. Bienestar. Creada para la riqueza. Conectada para la libertad. Estrategia de élite. Sin excusas".
Flanigan también abogaba contra la violencia doméstica y animaba a otras madres a trabajar desde casa para "escalar y convertirse en el 1%".
Investigación continúa
El caso ha abierto un nuevo debate en Australia sobre el acceso a contenidos y discursos potencialmente peligrosos en plataformas sociales, así como la detección temprana de posibles signos de desequilibrio mental o riesgo. Hasta el momento, las autoridades no han establecido un motivo oficial, y la investigación continúa.
Mientras tanto, la comunidad de Moore Park Beach permanece consternada por el hecho y ha comenzado a organizar vigilias en memoria de la menor fallecida.
