Una semana después de que se registraron disturbios en Nahualá y Santa Catarina Ixtahuacán, Sololá, se mantiene un despliegue de personal del Ejército y la Policía Nacional Civil (PNC) en esas localidades.
El portavoz de la cartera de la Defensa, Rubén Tellez, dio a conocer que actualmente la situación es “tranquila”, pero como medida de prevención se realizan operaciones conjuntas.
Estas acciones están a cargo de un contingente integrado por 200 elementos de las fuerzas de seguridad y castrenses que están distribuidos en distintos puestos de control.
Al menos cuatro soldados resultaron heridos el pasado domingo cuando un vehículo militar fue atacado a tiros en una zona sumida en un añejo conflicto limítrofe entre los dos poblados que en diciembre dejó 13 muertos.
De este hecho, al menos tres soldados y un oficial resultaron heridos, por lo que desató un enfrentamiento entre la unidad militar y sus agresores. https://t.co/PA5ebEUuBP
— Emisoras Unidas (@EmisorasUnidas) May 2, 2022
Incidentes en Sololá
Desconocidos, con “armamento de grueso calibre”, atacaron el vehículo donde se transportaban un jefe militar de la región y otros siete efectivos en una zona cercana al área urbana del municipio de Santa Catarina Ixtahuacán, dijo a periodistas el coronel Rubén Tellez, vocero de las Fuerzas Armadas.
La unidad realizaba una supervisión a los bases militares desplegadas en la zona que mantienen patrullajes de seguridad en Santa Catarina Ixtahuacán y el municipio vecino de Nahualá, a raíz de la matanza ocurrida a finales del año pasado.
Tellez explicó que los cuatro soldados heridos se encontraban “estables” y fueron trasladados al hospital del Ejército en la capital.
Agregó que el ataque “pone en riesgo la seguridad y la gobernabilidad” del área, donde el presidente Alejandro Giammattei estableció en enero el inicio de las negociaciones con los dos alcaldes y líderes comunitarios para resolver el conflicto, principalmente en la definición de los límites municipales.
Santa Catarina Ixtahuacán y Nahualá están enfrentados en una pugna de más de 100 años por los límites entre ambos pueblos de la misma etnia maya, una disputa que ha generado varios episodios de violencia.