Sus logros, carisma y humildad han llevado a Kevin Cordón a convertirse en ejemplo de las nuevas generaciones, además, su cuarto lugar en los Juegos Olímpicos de Tokio y ser uno de los mejores del continente le han permitido escribir su nombre con letras de oro en la historia del deporte nacional. Y hoy, en el 201 Aniversario de Independencia, el zacapaneco nos cuenta sus experiencias representando a Guatemala a nivel mundial, nos divierte con sus anécdotas y nos revela sus sueños.
Pese a que el deporte guatemalteco atraviesa por duros momentos por la advertencia de suspensión del Comité Olímpico Internacional, por la suspensión de los estatutos del COG de parte de la Corte de Constitucionalidad, Kevin se mantiene positivo, entrenando fuerte como siempre y con sus sueños intactos. Seguir representando a Guatemala es lo que más anhela. Y en una charla amena con Emisoras Unidas nos cuenta algunas de sus experiencias de vida.
El zacapaneco Kevin Cordón y el orgullo que siente al representar a Guatemala a nivel mundial 👏👏👏 https://t.co/uy9uFsCT7S pic.twitter.com/awthrckzCM
— Reina Damián S. 😻⚽️ (@ReinaDamian) September 15, 2022
Pusiste a Guatemala en el mapa mundial del bádminton…
Desde el bádminton he podido ver cómo el deporte guatemalteco ha cobrado valor y relevancia. Ahora enfrentarse a un chapín es cosa seria, así nos ven los demás.
¿Cómo cambió tu vida después de los Juegos de Tokio?
Ha sido un cambio grande y bonito. Llevaba años buscando algo para decir ‘misión cumplida en mi carrera’, no sabía si pasaría en un Mundial o en Juegos Olímpicos, solo sabía que en ese momento lo diría. Y ya puedo decir que mi carrera deportiva se hizo de la mejor manera e irme satisfecho.
Un año después, ¿aún se te eriza la piel recordarlo?
Sí. Antes cuando veía los videos de otros deportistas en instancias finales y la emoción que sentían yo deseaba estar en esa posición y que lo haya vivido fue muy gratificante. En el tema personal también hubo un cambio porque se me dio la oportunidad de retribuirle al deporte todo lo que me ha dado y ser inspiración para los niños.
¿Ya ubican a nuestro país a nivel internacional?
Sí, lo qué más reconocen es como el país ha logrado resultados relevantes a pesar de las limitaciones económicas y por medio de un deporte que no es prioridad en Latinoamérica. Hay mucha diferencia cuando nos comparan con países desarrollados, por eso nos dan mérito.
¿Alguna vez te han preguntado dónde queda Guatemala?
Sí (sonríe). En 2011, en el Mundial de Londres, me tocó jugar la primera ronda contra un chino, que son los mejores del mundo en bádminton, y me preguntó dónde quedaba Guatemala, mi única referencia fue decirle que a la par de México. Pero luego, en ese mismo evento, un reportero me preguntó si Guatemala era una isla de África (se carcajea).
¿Y cuánto valor tiene representar a nuestro país?
A parte de ser un gran compromiso, desde que salgo al extranjero ya soy Kevin, de Guatemala, no puedo hacer cosas feas o tontas porque pongo en mal a todo un país. Por eso cuando obtengo resultados a nivel internacional y veo hondear la bandera y escucho el Himno Nacional, es lo mejor que me puede pasar. Lloro porque me vienen todos los recuerdos… es inevitable. Aceptar el compromiso de llevara a Guatemala sobre los hombros me hace sentir orgulloso.
¿Qué es lo que más resaltas de ser guatemalteco?
Que a pesar de ser es un país pequeño y con dificultades, los chapines somos de corazón noble y bueno, lo dice la gente en el extranjero, y que se lo digan a uno es algo muy bonito. Es lindo que se expresen, pero sería más bonito que todos aquí en Guatemala nos la creyéramos.
Y a raíz de tu logro en Tokio, ahora también sobresales fuera de la cancha…
Sí (sonríe) hasta anuncios he hecho. Es un tema difícil porque soy bien tímido y reservado, pero lo he disfrutado. No es para nada fácil, la gente que se dedica a esto definitivamente tiene un don. Hay que memorizar todo, pero lo más difícil es actuar de manera natural. Son experiencias de vida.
¿De cuántas marcas has sido imagen?
No las he contado, pero han sido varias campañas las que he hecho. Gracias a Dios las marcas se han acercado a mí y es bonito hacer ese tipo de cosas. La más reciente fue la marca de relojes G-Shock, que es un reloj deportivo de gran resistencia.
¿Y cuánto valor representa para ti este tipo de patrocinio?
Lastimosamente en Guatemala no se puede vivir solo del deporte, entonces que vengan marcas y me apoyen, económicamente, es una ventaja. Esto me permite concentrarme en el deporte y no estar pendiente de lo de más. Si sigo teniendo buenos resultados van a seguir viniendo ese tipo de ayuda. Además, es una forma de seguir siendo ejemplo para las nuevas generaciones.
¿Dónde te ves fuera de la cancha?
Quiero tener mi familia, me encantaría tener hijos, es uno de mis objetivos personales, y de ahí, independientemente si estoy ligado directo o indirectamente al deporte, quiero dar mi conocimiento a nuevas generaciones para que lleven el bádminton a un mejor nivel. Sería egoísta de mi parte decir que me retiro sin dar más, es mi obligación moral, retribuirle al deporte todo lo que me ha dado. Luego vendrán mis sueños personales, tener un negocio, primero Dios se me dé.
¿Tienes novia?… ¿Tu esposa será de Guatemala?
Voy poco a poco conociéndola, es difícil por el deporte, pero sí se puede (sonríe), sé que vendrá alguien que me hará dejar la raqueta por un lado. Tiene que ser de Guatemala (se sonroja).