La Secretaría de Bienestar Social de la Presidencia (SBS) implementó el cultivo de pascuas como un método terapéutico para los jóvenes residentes del Centro Juvenil Etapa 2, quienes se encuentran en proceso de reinserción.
Para el 2022 se espera una producción de 400 plantas, las cuales estarán a la venta en los distintas Ferias de Niñez y Adolescencia este fin de año. Mientras tanto, para el 2023 se tiene previsto incrementar la producción.
La institución resaltó que las pascuas han marcado, durante décadas, la llegada de la Navidad y se han convertido en uno de los principales adornos de mayor adquisición para las familias guatemaltecas.
Por ello, se optó por poner en marcha este proyecto desde hace tres años. En especial porque esta flor requiere de un cuidado delicado y complejo, por lo que puede tomarse como un tema terapéutico para los menores.
Andrea Soto, psicóloga infantil, explicó que cultivar o cuidar de plantas ayuda a los jóvenes a reducir los niveles de cortisol, que es la hormona que produce estrés.
“Aumenta el optimismo, mejora el estado de ánimo, les permite una desconexión total a sus problemas y tienen mayor facilidad para socializar”, agregó.
Mientras tanto, Vicente, residente del centro, aseguró que el cultivo de las pascuas le ha permitido mantener ocupada su mente y calmar el estrés.
“También me hace conciencia de que todo en la vida son procesos y que comenzar de cero trae sus ventajas”, manifestó.
👉🏼 Las pascuas durante décadas han marcado la llegada de la navidad, lo que las ha convertido en uno de los principales adornos de mayor adquisición para cientos de familias guatemaltecas, por ello, la #SBS ha optado la siembra y cultivo de pascuas como… 1/2 pic.twitter.com/b04hShX45o
— Secretaría de Bienestar Social de la Presidencia (@somossbs) November 9, 2022
Resultados positivos del cultivo de pascuas
El director del Centro Juvenil explicó que la siembra de estas plantas forma parte del proyecto de “cero ocio” y tras su implementación se han observado los resultados positivos en los huéspedes de Etapa 2.
“Esta práctica permite que ellos, desde cero, realicen el proceso y el cuidado. Además, de que la pascua se convierte en su responsabilidad”, mencionó.
Agregó que la venta de las flores en los diferentes bazares en instituciones del Estado les ha permitido recaudar fondos para la ampliación del vivero, la compra de abono, fertilizantes y semillas.