El deporte guatemalteco tuvo una vibrante noche el pasado 10 de abril gracias a la destreza, garra y valentía de Lester Martínez. El nacional portó con orgullo los colores Azul y Blanco tras ganar su décimo quinto combate en el boxeo nacional y mantener su invicto gracias a un nocaut técnico sobre el estadounidense Isaiah Steen.
Tras el combate, que fue muy físico, Martínez habló sobre el ring de lo que significó este triunfo y de cómo pasó las dificultades propuestas por Steen, quien sobre la recta final del combate le propinó un cabezazo que le generó una hemorragia al nacional. "Después de el cabezazo comencé a tener una hemorragia. Sabía que en algún momento me podría afectar y me desconcentró un poco, pero cuando terminó el round me valió madres y pensé que tenía que pelear con huevos", expresó Lester Martínez.
La resistencia del nacional es una de sus más grandes características, algo que de manera simbólica no se debe solo a sus entrenos sino también a todo el apoyo de su familia y de la afición guatemalteca que al grito de "Lester. Lester", le llenaba de energía al pugilista en Las Vegas. "Yo creo que ya han visto que he tenido muchas peleas complicadas. Creo que mi familia estaba muy preocupada, pero quiero agradecerles. También a mi gente chapina les quiero decir que ganamos", añadió.
A la tercera fue la vencida...
Para nadie era un secreto lo mucho que el entorno del petenero luchó por cumplir su sueño de verle pelear en Las Vegas, pero estos intentos fueron hasta dos veces truncados en el pasado y fue hasta el 10 de abril que logró Lester su tan esperado anhelo. "De hecho mucha gente sabe que siempre que iba a pelear en Las Vegas pasaba algo, esta fue la tercera vez que pactaba una pelea. Como dicen 'la tercera es la vencida'", concluyó.