Tras nueve días ingresado por una operación de abdomen, el papa Francisco, de 86 años, salió este viernes del hospital Gemelli, en Roma, para regresar al Vaticano, donde su evolución será vigilada de cerca ante un verano con una agenda cargada.
El papa Francisco salió en silla de ruedas, sonriendo, a las 08:45 horas (locales) del Policlínico Gemelli, en cuyas puertas era esperado por una multitud de feligreses y periodistas. “Todavía vivo”, respondió el pontífice a una periodista que le preguntó cómo se sentía.
Rodeado de una multitud, se entregó a algunos saludos y agradecimientos antes de subir a su Fiat 500 blanco, bajo un fuerte dispositivo de seguridad.
La mañana de este viernes, 16 de junio, el #PapaFrancisco fue dado de alta del Hospital #Gemelli de Roma, donde se encontraba hospitalizado desde hace más de una semana para someterse a una laparotomía y a una cirugía plástica de la pared abdominal con prótesis. pic.twitter.com/MaEKmuNCv6
— Vatican News (@vaticannews_es) June 16, 2023
Tras dos paradas, una de ellas en la basílica de Santa María la Mayor, volvió al Vaticano. Celebrará la oración del Ángelus el domingo, pero su audiencia general semanal del miércoles será cancelada para que pueda descansar, detalló la Santa Sede. A partir del lunes, retomará el resto de sus audiencias y reuniones programadas.
El #PapaFrancisco salió del Hospital #Gemelli donde se encontraba hospitalizado desde hace más de una semana para someterse a una laparotomía y a una cirugía plástica de la pared abdominal con prótesis. pic.twitter.com/WmTLjizqCa
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“Mejor que antes”
El 7 de junio, el papa Francisco fue hospitalizado y sometido a una operación de tres horas, con anestesia general, para reducir unas dolorosas “adherencias” en su pared abdominal, consecuencia de su operación de colon en julio de 2021.
Durante todo su ingreso hospitalario, el Vaticano fue publicando boletines de salud diarios para enviar un mensaje tranquilizador, mencionando una “evolución regular”, un buen cuadro clínico y unos “análisis de sangre normales”. “El Papa va bien. Está mejor que antes”, dijo su cirujano, Sergio Alfieri, que lo saludó a su salida.
Con problemas de cadera, dolores de rodilla, varias operaciones y una infección respiratoria en su historial, el Papa argentino ha sufrido problemas recurrentes de salud desde su elección en 2013.
*Con información de AFP