Paquita la del Barrio, famosa por su estilo único y sus letras cargadas de empoderamiento femenino, falleció este lunes rodeada de sus seres queridos.
Su partida marca el fin de una era en la música ranchera y popular mexicana, dejando un legado que perdurará en la memoria colectiva.
El repertorio de Paquita la del Barrio incluye canciones que se han convertido en himnos de la música popular mexicana.
Temas como "Cheque en blanco", "Que me lleve el diablo", "Las mujeres mandan" y "Viejo rabo verde" son solo algunos de los títulos que consolidaron su carrera y que seguirán siendo parte de las reuniones y celebraciones en México y más allá.
Ella le cantaba al desamor desde el dolor y el coraje, algo que logró cautivar al público en Latinoamérica.
La vida amorosa de Paquita la del Barrio estuvo marcada por traiciones que influyeron profundamente en su carrera artística.
En múltiples ocasiones, la cantante reveló cómo las infidelidades de Alfonso Martínez la llevaron a escribir las canciones que la catapultaron a la fama, convirtiendo su dolor personal en himnos que han resonado con miles de personas que han experimentado desamor.
Su historia de amor
Paquita la del Barrio conoció a Alfonso en la Ciudad de México en la década de 1970, después de dejar su pueblo natal, Alto Lucero, Veracruz.
En ese momento, la cantante ya había pasado por un primer matrimonio fallido con Gerardo, su primer esposo, y se trasladó a la capital buscando nuevas oportunidades.
Sin embargo, su relación estuvo marcada por el sufrimiento, ya que él la engañó en múltiples ocasiones e incluso tenía otra familia.
Cuando finalmente descubrió la doble vida de su esposo, decidió separarse, aunque no dejó de sentir cariño por él.
Años después, en entrevistas, Paquita reveló que él fue el hombre que más amó y que siempre lo recordaba con el mismo amor de siempre. Tras su muerte, ella decidió no volverse a casar
Tras esa relación, tuvo otros romances, pero nunca volvió a casarse ni a entregarse de la misma manera, pues su música y su carrera se convirtieron en su principal prioridad.
