El fiscal federal Jack Smith presentó su renuncia al Departamento de Justicia de Estados Unidos después de encabezar investigaciones clave contra el presidente electo Donald Trump, en al menos dos de los 34 casos en los que fue declarado culpable en Nueva York.
La dimisión de Smith se produce a tan solo nueve días de que Trump tome posesión de su cargo, tras haber sido elegido el pasado 5 de noviembre. La renuncia ocurre en medio de un panorama judicial tenso, con varias investigaciones aún pendientes de resolución, entre ellas el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021 y el intento por influir en las elecciones presidenciales de 2020, que dieron la victoria a Joe Biden.
Smith presentó su informe final confidencial al fiscal general Merrick Garland el 7 de enero de 2025, documento que podría contener información relevante sobre los casos que involucran a Trump. Según una nota a pie de página difundida por medios de comunicación, la renuncia del fiscal fue oficializada el pasado 10 de enero. CNN obtuvo una carta en la que Smith explicó su salida, señalando que su trabajo en el Departamento de Justicia estaba completo.
No obstante, la publicación del informe final enfrenta obstáculos. La jueza federal Aileen Cannon había ordenado en julio de 2024 restricciones a la divulgación de parte del contenido recopilado por Smith. En su renuncia, Smith señaló que la decisión de Cannon sobre la ilegalidad de su nombramiento y la financiación irregular de su investigación complicaron el desarrollo de su trabajo.
Informe final de Jack Smith podría influir en futuros procedimientos legales
Tras su victoria electoral, Trump se ha beneficiado de la inmunidad presidencial, lo que ha llevado a la desestimación de algunos cargos, como los relacionados con el asalto al Capitolio y presuntos casos de fraude. Sin embargo, el informe final de Smith podría influir en futuros procedimientos legales, incluso antes de que Trump asuma oficialmente la presidencia.
Jack Smith fue designado fiscal especial por Merrick Garland, fiscal general, en un esfuerzo por garantizar la independencia en investigaciones sensibles. Desde su nombramiento, Smith se convirtió en una figura polémica, enfrentando críticas constantes de Trump, quien lo calificó como parte de una "cacería de brujas". El mandatario electo incluso prometió despedirlo de inmediato al asumir el cargo.
El futuro de las investigaciones lideradas por Smith sigue siendo incierto, mientras Trump se prepara para su regreso a la Casa Blanca y el Departamento de Justicia enfrenta presiones para divulgar las conclusiones del informe.
