El alcalde de Santa María de Jesús, Mario Pérez, brindó detalles este viernes 11 de julio de la situación que se vive en esa localidad luego de los fuertes sismos ocurridos esta semana y la secuencia que se mantiene y refleja cerca de 400 réplicas.
Explicó que los derrumbes generados en las carreteras dejaron a la localidad sin energía eléctrica y con los accesos y salidas cerrados, ya que el material está cubriendo las principales rutas y no ha sido removido en su totalidad.
En medio de esta situación, ante el temor de perder sus pertenencias, pero a su vez de quedar atrapados si vuelven a darse fuertes temblores, algunas personas han optado por dormir en la vía pública en improvisadas condiciones.
"La gente, como ya se sabe que aquí a cada rato se siente el movimiento sísmico, por precaución, muchos están a la intemperie, porque tampoco quieren usar las casas para resguardarse", relató el funcionario.
Sus declaraciones se dieron durante una entrevista en el programa A Primera Hora, de Emisoras Unidas, donde también señaló que mantiene comunicación con la Gobernación Departamental de Sacatepéquez para la atención de los vecinos.
El Ejecutivo le da seguimiento a situación que enfrenta la población e incluso el propio presidente de la república, Bernardo Arévalo, visitó el municipio un día después de que comenzó la secuencia sísmica y conversó con los vecinos para indicarles las medidas a tomar. También les expuso que se tienen albergues habilitados para atenderlos y que se reforzaría la seguridad.
Acerca de este último punto también se consultó al alcalde en el marco de la entrevista, especialmente después de la jornada de disturbios que se vivió en las últimas horas en Santa María de Jesús donde al menos cuatro presuntos ladrones fueron vapuleados.
El jefe edil expuso que se cuenta con presencia del Ejercito y de la Policía Nacional Civil; sin embargo, señaló que han sido insuficientes los elementos para resguardar toda el área ante la alta cantidad de habitantes, unos 45 mil, y el amplio terreno por cubrir.
"Mucha gente abandonó sus hogares y lamentablemente los ladrones, aprovechándose de esa situación, empezaron a entrar a saquear hogares", dijo.
"La gente ase armó de valor, organizaron grupos y lograron capturar a aproximadamente cuatro ladrones. Esta gente no aguantó por todo lo que estaba sucediendo y tengo conocimiento que fueron capturados, linchados y quemados, casi como tipo 1 de la mañana", añadío sobre los recientes incidentes.
Temor, incertidumbre y solidaridad
Luego de casi tres días desde que comenzó la actividad sísmica que mantiene en alerta a la población y las autoridades, persiste la incertidumbre en quienes perdieron sus viviendas ante los daños generados por los fuertes temblores.
El haber quedado prácticamente incomunicados también ha influido en que crezca la incertidumbre en los habitantes de Santa María de Jesús, que han expuesto falta de insumos para poder abastecerse, ya que las tiendas han quedado vacías porque no han ingresado los proveedores para surtirlas. En ese sentido, el Gobierno ha trasladado ayuda humanitaria por vía aérea que está siendo entregada a los afectados.
El alcalde de ese municipio detalló que se ha tenido ayuda humanitaria y que la iglesia católica estaba apoyando en la distribución, pero desde hoy se recibirán los insumos en la municipalidad y será esta la entidad encargada de la entrega.
Indicó que un punto primordial que les afectó fue la limitación del acceso al agua potable, ya que la falta de energía tuvo impacto en el sistema de pozos. Pero, ante trabajos que ya habilitaron parcialmente la luz, el 40 por ciento de los pozos empezaron a funcionar. Sumado a ello, hay dos pozos con grietas a consecuencia de los sismos y deberán ser reparados.
Por aparte, el jefe edil se refirió a los daños en la infraestructura, pues se han reportado viviendas con daños leves, moderados y severos, así como pérdida de inmuebles como iglesias y otras sedes. Según sus palabras, aunque no se ha concluido un análisis para conocer cuántas familias perdieron sus hogares, se calcula que al menos el 50% de los habitantes está en esa condición.
"Por ejemplo, hogares que todavía mantenían con adobe la construcción, totalmente se vinieron al suelo. Las casas de block, cemento, sufrieron bastante daño la mayor parte de viviendas o diría que casi todas", relató.
Ante este escenario, señaló que se ha invitado a que la población acuda a los albergues, pero por el temor al robo de sus pertenencias, no han accedido.
Finalmente, el funcionario indicó que desconoce si existe algún tipo de fondo a cargo del Gobierno para aplicar en la reconstrucción de esa localidad. En ese sentido, señaló que se da seguimiento al tema.



