Las redes sociales, especialmente plataformas como TikTok, han sido una parte fundamental en la vida de millones de personas, sobre todo de jóvenes y adolescentes, que encuentran en estos espacios una forma de entretenimiento y expresión. Sin embargo, los retos virales, aunque aparentemente inofensivos, han generado preocupación debido a los peligros que conllevan, especialmente cuando los menores de edad imitan conductas riesgosas.
El 13 de marzo, una niña de 11 años en Brasil, identificada como Brenda, perdió la vida tras intentar replicar uno de estos desafíos virales que circulan principalmente entre los estudiantes. Este reto, que ella vio en TikTok, consistía en inhalar desodorante en aerosol, un acto que rápidamente se viralizó en redes sociales, sin considerar las graves consecuencias que podría acarrear.
El incidente ocurrió en su hogar, en la calle Bom Jardim, ubicada en la región Agreste de Pernambuco. Brenda, al igual que muchos jóvenes, había visto este reto en TikTok y decidió grabarse realizando la peligrosa práctica. Al notar el grave estado de la niña, sus familiares llamaron a los servicios de emergencia, quienes rápidamente llegaron al lugar.
Sin embargo, debido a la gravedad de la sustancia inhalada y el paro cardiorespiratorio que sufrió, los paramédicos no pudieron hacer nada por salvar su vida. A pesar de ser trasladada al hospital municipal y recibir atención durante más de 40 minutos, los intentos por reanimarla fueron infructuosos, y los médicos confirmaron su deceso.
Reacciones tras muerte de niña por reto de TikTok
Este trágico suceso ha generado un fuerte rechazo en redes sociales, donde muchos usuarios de TikTok expresan su preocupación por los peligros de los retos virales, especialmente los que involucran a menores de edad.
Si bien no se recomienda seguir cualquier reto viral difundido por influencers o cuentas verificadas en redes sociales, las autoridades sanitarias ya han alertado previamente sobre el riesgo de usar productos como el desodorante en aerosol para consumo. El aerosol contiene una alta concentración de químicos tóxicos, que pueden ser sumamente peligrosos cuando se dispersan en el aire y se inhalan.
