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Humberto Ak’abal, escritor momosteco y caracterizado por redactar poemas en idioma quiché y posterior traducirlos al español, dedicó un verso sobre la tragedia del volcán de Fuego, ocurrida el 3 de junio a las 15:00 horas, y la cual ha dejado 113 muertes.
Entrevistado por Alberto Chaclán, corresponsal en Totonicapán, Ak’abal dijo que al redactar ese poema “no puede quedarse ajeno al dolor de nuestros hermanos guatemaltecos que sufren padecimientos”.
“No tengo otra manera de poder acercarme a ellos, y lo que tengo a mano es mi lápiz y papel. Por eso escribir ese sentimiento para patentizar mi solidaridad y que dejó un testimonio en verso de esta tragedia”, añadió.
El escritor originario de Momostenango, Totonicapán, aprovechó el espacio para felicitar al equipo periodístico de Emisoras Unidas por el trabajo que se ha realizado en dicha cobertura de la tragedia volcánica.
Este es el poema escrito por Humberto Ak’abal llamado Muqubal Ixkanul (Volcán Panteón)
Y despertó el hambre del volcán,
salió a comer
abrió su boca
y su gran lengua de fuego
lamió los pueblos.
Dejó un mar de cenizas
un lastimero eco de suspiros,
soledad de soledades,
una tristeza tras otra,
gemidos y lágrimas,
lágrimas y más lágrimas…
¡Ay! corazón
¿dónde poner más dolor?
La herida duele
los gritos no los borra el viento,
las horas pasan
y el peso sigue aquí,
aquí donde más duele,
aquí donde el llanto
ya no puede más.
Los desenterrados
con su rostro cenizo
dejaron su testimonio de agonía,
de espanto y terror…
Y aquellos, cuyo grito
ya no salió a flor de tierra,
que se ahogaron
en el mar de lava,
y que se quedaron allí
para siempre clamando
en ese Volcán de Fuego,
no volverán nunca más…
Viejo volcán panteón
de los enterrados vivos,
negro recuerdo
de aquel tres de junio
a las tres en punto de la tarde.
Y tal vez un día de estos
saldrá su gritó
a recorrer las sombras,
a arañar los vientos
y a desgarrar la noche,
esa noche suya
que nunca más
tendrá amanecer.
Y como salidos del inframundo,
los sobrevivientes deambulan,
como resucitados
en un mundo desconocido,
con la mirada perdida,
los torpes pasos
y la sequedad del alma…
Si antes la pobreza
los tenía en harapos,
ahora van por los caminos
ya solo vestidos de cenizas…
¡Ay!, corazón,
corazón roto,
¿Dónde poner más dolor?
https://soundcloud.com/user-642794698/reporte-de-alberto-chaclan-volcan-panteon