Con información de Álvaro Alay / Publinews
La mesa técnica de los ríos Achiguate y Coyolate, en Escuintla conformada por Instituciones del Estado, junto con iniciativa privada y el Instituto Privado de Investigación sobre Cambio Climático, llevaron a cabo un recorrido en las principales cuencas de estos afluentes, los cuales han sufrido daños por el sedimento que ha descendido del volcán de Fuego desde su erupción el pasado 3 de junio.
Según estimaciones del Instituto Privado de Investigación sobre Cambio Climático (ICC), la erupción del volcán de Fuego generó que se depositaran alrededor de 20 millones de metros cúbicos de material volcánico en las faldas de ese coloso, de los cuales un 5 por ciento ha descendido a los causes de los ríos, acumulándose y provocando la obstrucción en algunos puntos.
En este sentido, Alex Guerra director del ICC mencionó que también se socavan las bases de los puentes, y se prevé que en temporada de lluvia puedan existir desbordamientos de los ríos, en algunos casos generando nuevos causes, e incluso algunos podrían atravesar los poblados aledaños.
“Estamos viviendo el impacto en la costa sur y lo seguiremos viviendo por todos esos millones de metros cúbicos que están bajando y se van a estos dos Ríos y afectan los esteros lo que afecta la navegación, la pesca y se cierra la bocabarra y ya no sale el agua y causa inundaciones locales”, indicó Guerra.
Municipios en riesgo
Entre las comunidades con mayor riesgo que ha identificado la mesa técnica, se encuentra Siquinala, Escuintla, Masagua, Puerto de San José, la Democracia, Santa Lucía Cotzumalguapa, La Gomera y Nueva Concepción, todos del departamento de Escuintla.
“Según nuestros datos, el mes más lluvioso es junio y septiembre, es cuando los ríos son más altos y descienden más lagares, lo que más preocupa es que si se tuviera una tormenta tropical porque bajaría más sedimento del volcán las crecidas son más grandes y el grado de afectación sería mayor”, subrayó el director del ICC.
Las autoridades han indicado que el dragado de los ríos no es recomendable, debido que sería un gasto que no tendría resultado por las altas cantidades de material que aún existe en las faldas del volcán de fuego.
Recomendaciones
Es por ello que las recomendaciones que se han emitido se enfocan en:
Realizar el trabajo de bordas como una acción preventiva y permanente ante inundaciones.
Realizar el monitoreo constante de los ríos para tener información actualizada que permita tomar decisiones inmediatas.
Mantener de forma permanente las mesas técnicas instaladas en los ríos.
Realizar estudios profesionales y técnicos que permitan generar información sobre modelos de lo que podría suceder en los próximos años en lluvias y sedimentaciones para poder tomar decisiones en temas de mitigación.