Archie Harrison Mountbatten-Windsor, hijo de los duques de Sussex, Meghan Markle y el príncipe Harry, fue bautizado en la Capilla Privada, en el Castillo de Windsor, informaron a través de un comunicado oficial compartido en su cuenta de Instagram.
El servicio fue íntimo, y según reza el comunicado éste fue oficiado por el Arzobispo de Canterbury, Justin Welby.
Los duques de Sussex externan en el comunicado que agradecen la amabilidad y el cariño que han recibido de parte del público para con su hijo Archie en este día tan especial.
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Se sabe que el pequeño Archie fue bautizado con “la réplica hecha a mano del vestido de bautizo real que han usado los infantes reales durante los últimos 11 años”, según se detalla en el comunicado.
En contraste con los bautizos de los tres hijos de Guillermo y Catalina, el de Archie, el séptimo en la línea de sucesión al trono, estuvo marcado por el secretismo de Meghan, muy celosa de su intimidad y, desde ahora, de la de su primogénito.
En la imagen oficial del bautizo de Archie no aparece la reina Isabel II, quien tenía otros compromisos.
