El 2020 pasará a la historia como uno de esos años que han marcado de forma muy significativa a la humanidad, especialmente en cuanto a desastres naturales se refiere.
Desde voraces incendios, hasta una violenta temporada de huracanes, e incluso una inesperada pandemia, el 2020 quedará en la memoria de todos como un año atípico y complicado.
Estos fueron los desastres naturales que más impacto causaron durante el año:
Pandemia de coronavirus
La pandemia del nuevo coronavirus fue el tema central del 2020. Un cambio radical en la vida de todos en el mundo, con cuarentenas y restricciones, que se agravaron más y más a medida que el número de contagios crecía exponencialmente.
El Covid-19 no solo provocó una crisis sanitaria nunca antes vista, que puso en evidencia la precariedad de los sistemas de salud a nivel global, incluso en los países industrializados, donde las unidades de ciudades intensivos se vieron desbordadas. También generó una crisis económica sin precedentes, con miles de negocios cerrados y millones de personas sin empleo, especialmente en América Latina.
A la fecha, la pandemia ha dejado más de 75 millones de contagios y ha cobrado la vida de más de 1.6 millones de personas en todo el mundo.
Un año caluroso
Previo a la pandemia, el tema que ocupó las portadas de los medios a nivel mundial fueron los incendios en Australia, que consumieron un estimado de más de 10 millones de hectáreas y provocaron la muerte de millones de animales a principios de 2020.
Expertos atribuyen el incremento de estos incendios al cambio climático y al aumento de emisiones de gases con efecto invernadero. De hecho, según la ONU, el 2020 fue uno de los tres años más calurosos desde que hay registros.
“El 2020 fue, por desgracia, otro año preocupante para el clima”, declaró Petteri Taalas, secretario general de la Organización Meteorológica mundial (OMM).
Huracanes Eta y Iota
También llamó la atención la inusual temporada de huracanes de este año en el Atlántico, la cual fue extremadamente activa, al punto de incluso establecer un nuevo récord al sumar 30 ciclones con denominación, de los cuales 13 se convirtieron en huracanes.
Por apenas segunda vez en la historia, se agotó la lista de nombres para las tormentas, por lo que hubo que recurrir al alfabeto griego para bautizarlas.
En noviembre, los huracanes Eta y Iota golpearon con fuerza a Centroamérica en un lapso de apenas dos semanas, castigando especialmente a Nicaragua y Honduras y dejando decenas de muertos y miles de damnificados.
Fenómeno de La Niña
Hacia finales de octubre, la OMM advirtió sobre el retorno del fenómeno de La Niña, con sus secuelas de tormentas, sequías y mal tiempo, que se prevé que se alargue hasta 2021.
La agencia especializada de la ONU señaló que este episodio sería “de intensidad moderada a fuerte”, precisando que la última vez que se registró un episodio así de intenso fue en 2010/2011, seguido de otro moderado en 2011/2012.
La Niña es un fenómeno que produce un enfriamiento a gran escala de la temperatura de la superficie del océano en las partes central y oriental del Pacífico ecuatorial, además de otros cambios en la circulación atmosférica tropical.