Debido a la presencia de una misteriosa variante de hepatitis que afecta especialmente a niños, se aceleraron los estudios sobre su posible vinculación con un adenovirus y la infección por covid-19.
Los resultados de los primeros análisis aún están en proceso cuando suman 348 los casos confirmados, según informó esta semana la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Uno de los primeros datos es que la mitad de los pacientes (170) se encuentran entre uno y seis años.
Adenovirus, un potencial sospechoso
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) presentó un informe tras indagar en un grupo de pacientes en Alabama.
Nueve niños pequeños afectados por los misteriosos casos de hepatitis en ese estado al sur de Estados Unidos, dieron positivo a un patógeno común llamado adenovirus 41. Según la agencia esto explicaría estas graves inflamaciones del hígado.
“En este momento, creemos que el adenovirus puede ser la causa de estos casos reportados, pero aún se están investigando otros posibles factores ambientales y situacionales”, se indicó en un comunicado que acompañó al estudio.
Se sabe que el adenovirus 41 causa gastroenteritis en los niños, pero “generalmente no se conoce como una causa de hepatitis en niños por lo demás sanos”, según los CDC.
Los adenovirus se transmiten comúnmente por contacto personal cercano, gotitas respiratorias y superficies. Hay más de 50 tipos de adenovirus, los que más comúnmente causan el resfriado, pero también muchas otras enfermedades.
Sin embargo, una investigación descartó otras exposiciones comunes, incluido el covid; el virus de la hepatitis A, B y C; la hepatitis autoinmune y la llamada enfermedad de Wilson, un trastorno hereditario poco frecuente.
Detalles de los casos conocidos en EE. UU.
Los nueve casos de Alabama ocurrieron entre octubre de 2021 y febrero de 2022. Tres experimentaron insuficiencia hepática aguda, dos de los cuales requirieron trasplantes de hígado.
“Todos los pacientes se han recuperado o se están recuperando, incluidos los dos receptores de trasplantes”, indicó el estudio.
Seis dieron positivo para el virus de Epstein-Barr pero no tenían anticuerpos, lo que implica una infección anterior, no activa.
Los niños tuvieron vómitos y diarrea, previo a ser hospitalizados, mientras que algunos presentaron síntomas de las vías respiratorias superiores. Durante las hospitalizaciones, la mayoría tenía los ojos y la piel amarillentos (ictericia) y mostraban agrandamiento del hígado.
En Estados Unidos, Wisconsin está investigando cuatro casos, incluidos dos niños que estuvieron graves, uno que necesitó un trasplante de hígado y una muerte.
Ministerio de Salud emite alerta
El Ministerio de Salud y Asistencia Social (MSPAS) activó una alerta desde el 6 de mayo pasado, pero se hizo pública tres días después.
El objetivo de la medida oficial es redoblar la prevención en hospitales para reportar cualquier caso anómalo de hepatitis infantil. La cartera descartó que por el momento haya algún caso confirmado en Guatemala.
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Recomendaciones
Se aconseja a los padres vigilar eventuales síntomas en sus niños (vómitos, orina oscura, heces claras, ictericia…) y contactar a un médico en caso de sospecha.
También como prevención es necesario el lavado adecuado de manos, evitar compartir comida, el uso correcto de la mascarilla y el cuidado de higiene en la preparación, manipulación y consumo de alimentos.
