Colombia sentenció un giro político en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de este domingo. El líder del Pacto Histórico, Gustavo Preto, consiguió más de 10 millones de votos que le aseguran su entrada a la Casa de Nariño, como el sucesor de Iván Duque y primer presidente de izquierda del país sudamericano.
Petro superó así por casi 800 mil votos al populista independiente Rodolfo Hernández, quien recibió el apoyo del 47.16 % de los electores, con 9 millones 277 mil 863 votos. La victoria de Petro, con el 50.57 % de los votos, marca el cierre de una asignatura pendiente del exguerrillero y evidencia el desencanto de la derecha uribista tras el paso de Duque por la presidencia. Petro, economista y exalcalde de Bogotá entre 2012 y 2015, se había presentado tres veces como candidato a presidente de Bogotá, perdiendo en segunda vuelta en 2018 contra Duque.
Colombia cambia con Petro y Francia https://t.co/eejewM3v4c
— Gustavo Petro (@petrogustavo) June 19, 2022
La reacción de Petro
“Hoy es día de fiesta para el pueblo. Que festeje la primera victoria popular. Que tantos sufrimientos se amortigüen en la alegría que hoy inunda el corazón de la Patria. Esta victoria para Dios y para el Pueblo y su historia. Hoy es el día de las calles y las plazas”, expresó Petro en un mensaje en Twitter.
Hoy es dia de fiesta para el pueblo. Que festeje la primera victoria popular. Que tantos sufrimientos se amortiguen en la alegria que hoy inunda el corazon de la Patria.
Esta victoria para Dios y para el Pueblo y su historia. Hoy es el dia de las calles y las plazas.
— Gustavo Petro (@petrogustavo) June 19, 2022
Tras el último gobierno militar de Colombia en 1958, el país había sido liderado hasta la actualidad por gobiernos liberales y conservadores, siendo el expresidente Juan Manuel Santos el mandatario cuya ideología se acercaba más a la izquierda. Pero las elecciones de este domingo marcan el inicio de una nueva etapa política en Colombia con la derrota de Hernández, un empresario de la construcción de corte populista, que no logró mantener la tradición de derechas con su discurso populista contra la contra la “politiquería” y la “robadera”.