El presidente de Juventud Pinulteca, Oliver Dighero, ha emitido un comunicado a través de las redes sociales del club, en el que anuncia su decisión de dejar su puesto al frente del equipo. La noticia llega en un momento significativo, tras haber logrado el ansiado ascenso, y está marcada por un tono de agradecimiento y reflexión sobre los desafíos enfrentados durante su gestión.
Oliver Dighero ha estado al mando del club josefino durante tres años y medio, un periodo lleno de emociones y dificultades tanto dentro como fuera del campo. En su mensaje, Dighero expresa su profundo agradecimiento a todas las personas que han sido parte de este viaje: el cuerpo técnico, los jugadores y, especialmente, a los aficionados que han apoyado al equipo incondicionalmente.
¿Qué pasará con Juventud Pinulteca?
“Hoy quiero dar gracias a Dios por haberme permitido formar parte de la historia de Juventud Pinulteca,” comienza su comunicado. “Gracias por todas las alegrías, tristezas y enojos, gracias por todo.”
Uno de los puntos centrales del comunicado es la admisión de los problemas económicos que han afectado al club. Dighero confiesa que no puede seguir manteniendo el proyecto debido a la falta de recursos financieros. “Se me acabaron las fuerzas y el dinero para poder continuar,” admite.
El presidente también menciona las dificultades logísticas relacionadas con el estadio. Aunque el club cuenta con un estadio bonito, no cumple con los requisitos para la Liga Nacional, lo que implicaría la necesidad de alquilar otro estadio, complicando la asistencia de los aficionados.
A lo largo de su mensaje, Dighero no deja de expresar su gratitud. “Gracias a todas esas personas que formaron parte en estos tres años y medio,” dice, haciendo un reconocimiento especial a los directivos que dedicaron su tiempo valioso al club.
También reflexiona sobre las críticas y el apoyo que ha recibido. Reconoce que habrá personas que lo insulten o critiquen, pero también espera comprensión de aquellos que entienden los sacrificios personales y económicos que ha realizado. “Estoy consciente que mucha gente me insultará, que mucha gente me criticará y que habrá mucha gente que entenderá porque la verdad hasta que uno no está dentro de una institución no sabe lo que se sufre,” afirma.
A pesar de su salida, Dighero se muestra optimista sobre el futuro del club y de San José Pinula. Confía en que las autoridades municipales eventualmente proporcionarán un estadio adecuado para todas las ligas del país y asegura que San José Pinula no se quedará sin fútbol. “Estoy seguro de que Pinula volverá con más fuerza y lo que nadie nos quitará es que en los libros de la historia del fútbol nacional quedará escrito el nombre de San José Pinula,” declara con convicción.
El comunicado cierra con un mensaje de esperanza y fe. “Todo se puede lograr si se pone en las manos de Dios, si se le pone un poco de amor y pasión,” escribe Dighero, reiterando sus disculpas por no poder continuar con el proyecto debido a la falta de recursos económicos.