El expresidente estadounidense y candidato republicano, Donald Trump, volvió a recurrir a su monólogo sobre la relación entre criminalidad e inmigración irregular para movilizar el voto conservador en California, un estado de mayoría demócrata, con la intención de mantener el control de la Cámara de Representantes en noviembre.
Trump se presentó en Coachella, ciudad al este de Los Ángeles conocida por el festival homónimo, como cabeza de cartel para hablar de la “invasión inmigrante” y prometer que si gana las elecciones el 5 de noviembre será “el día de la liberación”.
THANK YOU, CALIFORNIA! pic.twitter.com/yfea57Tu8H
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) October 13, 2024
La guerra de Trump contra los datos
El expresidente volvió a usar a la banda transnacional Tren de Aragua para trazar una relación directa entre inmigración ilegal y la criminalidad en el país, algo que no está apoyado por los datos, que indican que el índice criminalidad entre los inmigrantes es menor que en el resto de la población.
“California ha sido invadida”, señaló el candidato presidencial. “Niñas hermosas están siendo cortadas en trozos”, incidió el exmandatario, que confía que el miedo a la inmigración irregular, que se disparó en los primeros años de la Administración del presidente Joe Biden, le ayude a ganar los comicios de noviembre.
Trump prometió la pena de muerte contra todo inmigrante que mate a un ciudadano estadounidense o un oficial de policía.
Trump says he’ll refuse disaster aid to California if they don’t obey him as president: “If you don’t do it we’re not giving you [aid]” pic.twitter.com/QPiSLKD8ad
— EssenViews (@essenviews) October 13, 2024
El republicano dijo que aplicará una ley de 1798 contra enemigos extranjeros de Estados Unidos para obtener la autoridad para deportar en masa a inmigrantes que han ingresado irregularmente en el país en lo que ha bautizado como ´Operación Aurora´, en referencia a la ciudad de Colorado que se volvió mediática por la supuesta presencia del Tren de Aragua.
Líderes locales de Colorado desmienten esta narrativa sobre criminalidad inmigrante, incluyendo al alcalde republicano de Aurora, Mike Coffman, quien aseguró esta semana que “las preocupaciones sobre la actividad de las pandillas venezolanas han sido burdamente exageradas”.
Con información de EFE.