El conflicto entre Kylian Mbappé y el París Saint-Germain (PSG) se ha intensificado en los últimos días, con el futbolista exigiendo el pago de 55,4 millones de euros pendientes de su último contrato. La abogada del jugador, Delphine Verheyden, ha dejado claro que su cliente no cederá hasta recibir la totalidad de la suma, argumentando que su lucha representa a todos los jugadores que podrían verse afectados por situaciones similares.
En declaraciones a L'Équipe, Verheyden señaló que el PSG está intentando evadir las reglas deportivas y que esto podría desencadenar una crisis en el sistema futbolístico. La abogada advirtió que el club está enviando un mensaje peligroso a otros equipos, instándolos a retener pagos y forzar a los jugadores a acudir a los tribunales, un proceso que podría extenderse durante años y perjudicar sus carreras.
Selon Delphine Verheyden, l'avocate de Kylian Mbappé, le PSG « veut échapper aux règlements du football »
— L'ÉQUIPE (@lequipe) December 20, 2024
Elle estime que le PSG fragilise tout un système en refusant de régler les 55,4 millions de salaires impayés
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¿Qué pasará en el caso Mbappé-PSG?
El viernes pasado, Verheyden presentó un nuevo recurso ante la Federación Francesa de Fútbol (FFF), con la esperanza de que la Comisión Superior de Apelación obligue al PSG a cumplir con las decisiones previas de la Liga de Fútbol Profesional (LFP), que ya se habían pronunciado a favor de Mbappé en septiembre y octubre. Además, la abogada considera que la FFF tiene la responsabilidad de llevar el caso ante la UEFA si el PSG persiste en su negativa.
Según Verheyden, la UEFA podría sancionar al PSG privándolo de la licencia necesaria para participar en competiciones europeas, lo que supondría un duro golpe para el club. La presión ejercida por Mbappé podría así inclinar la balanza a su favor antes de recurrir a los tribunales ordinarios, donde el PSG confía en obtener un fallo más favorable.
Por su parte, el PSG argumenta que el futbolista renunció a esa suma de manera implícita cuando alcanzó un acuerdo con el presidente Nasser Al-Khelaifi a principios de la temporada pasada. El club sostiene que, tras un mes de separación del primer equipo, Mbappé fue reincorporado con la condición de no abandonar la entidad sin dejar beneficios económicos al PSG. Desde la perspectiva del club, el pacto exime a la entidad de realizar el pago de los 55,4 millones de euros.
El desenlace de este enfrentamiento podría sentar un precedente importante en el mundo del fútbol, definiendo las responsabilidades contractuales de los clubes y los derechos de los jugadores en situaciones similares. Por ahora, Mbappé y el PSG continúan en una disputa que podría alargarse, pero cuyas repercusiones podrían sentirse en toda Europa.
