El Real Madrid Femenino logró una victoria histórica ante el Barcelona al imponerse 1-3 en la jornada 23 de la Liga F. Este triunfo representó el primero en un Clásico para el conjunto blanco, que había caído en los 18 enfrentamientos previos ante el equipo azulgrana. Alba Redondo abrió el marcador para las madridistas, mientras que Caroline Weir firmó un doblete que sentenció el partido. Por parte del Barcelona, Graham Hansen anotó el único tanto de su equipo en un duelo que deja la lucha por el título más abierta que nunca.
El partido se disputó en el Estadio Olímpico Lluís Companys de Montjuïc bajo un clima cambiante, con momentos de sol y lluvia intensa. Desde el inicio, el Barcelona se mostró más dominante, con un juego ofensivo y constantes llegadas al área rival. Sin embargo, el Real Madrid, bien ordenado defensivamente y con transiciones rápidas, aprovechó al máximo sus oportunidades. En el minuto 41, Alba Redondo cabeceó un centro preciso y puso en ventaja a las blancas. Minutos después, el Barcelona tuvo la ocasión de igualar, pero Hansen erró una clara oportunidad frente al arco defendido por Misa Rodríguez.
Real Madrid marca un precedente
Tras el descanso, las azulgranas buscaron con insistencia el empate, lo que lograron en el minuto 67 con un remate de cabeza de Hansen tras un centro de Mapi León. Sin embargo, el Real Madrid no bajó los brazos y encontró su premio en los instantes finales. Linda Caicedo, quien ingresó en la segunda mitad, fue clave en la jugada del segundo gol al desequilibrar por la banda y asistir a Weir, quien definió con gran precisión en el minuto 87. Este tanto descolocó al conjunto local, que en tiempo añadido recibió el tercero, nuevamente por medio de Weir, tras un rechace dentro del área.
El Barcelona protestó airadamente un gol anulado a Jana Fernández en el minuto 80 por un fuera de juego inexistente, una acción que pudo haber cambiado el desenlace del encuentro. No obstante, el Real Madrid se mostró firme en defensa y aprovechó su oportunidad en los momentos decisivos del partido. La eficacia de las blancas y su capacidad para castigar los errores defensivos del rival marcaron la diferencia en un Clásico que pasará a la historia.
Con esta victoria, el Real Madrid reduce la distancia con el Barcelona en la tabla de posiciones y mantiene vivas sus aspiraciones en la lucha por el título. Por su parte, el equipo catalán sigue dependiendo de sí mismo para ganar la Liga F, pero esta derrota supone un golpe anímico importante. Más allá del resultado, este Clásico femenino marca un punto de inflexión en la rivalidad entre ambos equipos y evidencia el crecimiento del Real Madrid en la élite del fútbol femenino.
