La FIFA anunció que destinará un total de 355 millones de dólares a los clubes que cedan jugadores para el Mundial 2026, cifra que representa un incremento de casi el 70 % respecto a la edición anterior. Este aumento significativo también viene acompañado de una ampliación en el número de beneficiarios, ya que, por primera vez, se compensará a los equipos que cedan futbolistas durante la fase de clasificación y no únicamente a aquellos cuyos jugadores disputen la fase final.
Este nuevo modelo de distribución responde al memorando firmado en marzo de 2023 entre la FIFA y la Asociación de Clubes Europeos (ECA), que buscaba un reparto más justo e inclusivo de los fondos. Con ello, la FIFA busca reconocer el papel clave de todas las entidades que aportan jugadores al espectáculo, tanto en los partidos preliminares como en el torneo principal. La medida se interpreta como un paso hacia una mayor solidaridad dentro del ecosistema futbolístico global.
FIFA busca apoyar a todos los clubes involucrados
Gianni Infantino, presidente de la FIFA, aseguró que esta iniciativa es un reconocimiento económico a la "inmensa contribución" de los clubes y los jugadores. Según sus palabras, el objetivo es reforzar la colaboración con las entidades que sostienen la base del fútbol de selecciones y garantizar que el beneficio se extienda a equipos de todas las regiones del mundo. Infantino calificó este esfuerzo como un paso hacia una edición histórica e inclusiva del Mundial de 2026, que se disputará en Estados Unidos, México y Canadá.
Por su parte, Nasser Al-Khelaïfi, presidente de la ECA, valoró positivamente la medida al considerar que fortalece la relación entre el fútbol de clubes y el de selecciones. A su juicio, este programa refleja la importancia de los clubes en el éxito de las competiciones internacionales, no solo en la cesión de jugadores para los grandes partidos, sino también en la formación y el desarrollo de talentos desde temprana edad.
En la última edición de este programa, correspondiente al Mundial de Catar 2022, la FIFA distribuyó 209 millones de dólares entre 440 clubes de 51 federaciones. La nueva cifra de 355 millones supone no solo un aumento récord, sino también un cambio de enfoque que beneficiará a un número mayor de instituciones deportivas en todo el planeta. Con ello, la FIFA consolida un mecanismo que pretende equilibrar el reconocimiento económico entre quienes contribuyen al desarrollo del fútbol global.



