En el corazón del Greenwich Village de 1961, un joven de Minnesota llegó para cambiar la historia de la música para siempre: Bob Dylan.
El biopic dirigido por James Mangold, "A Complete Unknown", nos sumerge en la transformación de un completo desconocido en la leyenda que conocemos de la música.
Los Oscars esperan con fuerzas estas nominaciones y este filme se perfila como uno de los grandes favoritos. Timothée Chalamet no solo interpreta al joven Dylan, sino que además canta, logrando una actuación que deslumbró tanto a la crítica como al público.
El filme retrata los momentos cruciales que forjaron al artista revolucionario: desde sus primeros pasos en la vibrante escena musical de Nueva York hasta su controversial transición del folk tradicional hacia nuevos horizontes musicales. La película marca un nuevo hito en la carrera de Mangold, quien ya demostró su maestría en el género biográfico con "Walk the Line" sobre Johnny Cash.
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Esta vez, el director capturó la esencia de una época de cambios radicales y el surgimiento de una voz que definiría a una generación. Las reseñas especializadas coinciden en destacar la magistral interpretación de Chalamet: "Cinco estrellas de puro entretenimiento respaldadas por una actuación de diez", señaló un crítico en Rotten Tomatoes.
Los fans de Bob Dylan celebraron la autenticidad del filme, especialmente en las escenas musicales donde los actores brillaron con luz propia. "Norton estuvo fabuloso como Pete. ¡Qué gran actor!", destacó un espectador entusiasta en redes.
Chalamet como el joven Bob Dylan trasciende la mera imitación para convertirse en una interpretación profunda y matizada que captura la compleja personalidad del músico. El elenco se completa con la destacada actuación de Edward Norton como Pete Seeger, recibiendo elogios unánimes de la crítica.
La transformación de Chalamet en Dylan no fue casualidad: el actor dedicó cinco años de preparación intensiva para encarnar al ícono musical. Durante este período, tomó clases de guitarra y canto, estudió exhaustivamente los gestos y maneras del joven Dylan, y se sumergió en la cultura folk de los años 60.
