Han pasado más de dos años desde la muerte de Julián Figueroa, hijo de Maribel Guardia y Joan Sebastian, y el vacío que dejó en su familia y en el mundo del espectáculo sigue presente. El joven cantante, promesa del regional mexicano, falleció a los 26 años el 9 de abril de 2023, en circunstancias que aún generan conmoción y preguntas sin respuestas claras.
En una reciente entrevista para el programa Sin Vergüenza, transmitido por YouTube, Imelda Garza Tuñón, viuda del artista, habló por primera vez de forma abierta sobre lo que vivió aquel día. Aunque confesó que aún le cuesta abordar el tema, compartió con franqueza el momento en que encontró el cuerpo sin vida de Julián.
Entre lágrimas, reveló que lo más difícil de ese recuerdo fue el olor que invadió el lugar, una impresión sensorial que, según dijo, quedó grabada para siempre en su memoria.
La gente no se imagina... es un olor que se queda impregnado. Como cuando alguien te dice café y tú lo recuerdas, así me pasa", expresó con un hilo de voz.
Los últimos días de Julián Figueroa
La entrevista también abordó los últimos días de Julián. Imelda relató que el cantante luchaba con sus demonios internos, en especial con las adicciones. A pesar de mostrar deseos de cambiar, una tristeza profunda lo arrastraba una y otra vez. El viernes previo a su muerte, Imelda salió al cine con su hijo mientras Julián se quedó en casa. Al día siguiente, contó, su comportamiento fue extraño y alarmante: subió al cuarto alterado, asegurando que veía serpientes a su alrededor, lo que incluso asustó a su pequeño.
El testimonio de Imelda Garza revela el lado más íntimo y doloroso de la tragedia, una historia marcada por el amor, la pérdida y el peso de lo no dicho. Julián Figueroa dejó un legado musical inconcluso y una huella imborrable en quienes lo amaron.
