El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, condenó este miércoles un nuevo ataque ruso con decenas de drones kamikaze en el que resultaron dañadas infraestructuras civiles e industriales en las regiones ucranianas de Krivi Rig y Sumi, y declaró que la continuación de este tipo de bombardeos demuestra que Rusia no busca "una paz real".
"Lanzar estos ataques a gran escala después de las negociaciones sobre el alto el fuego es una señal clara a todo el mundo de que Moscú no va a buscar una paz real", escribió Zelenski en sus redes sociales, en referencia al lanzamiento por parte de Rusia de 117 drones contra territorio durante la pasada noche.
El presidente de Ucrania insistió en pedir "presión clara y acciones contundentes" en forma de sanciones de la comunidad internacional contra el Kremlin "para detener los ataques" rusos.
El último ataque ruso con decenas de drones se produce después de que Rusia y Ucrania acordaran el martes en EE.UU. seguir trabajando para establecer los detalles concretos de una tregua que ponga fin a los ataques a las infraestructuras energéticas enemigas.
Aunque en los comunicados publicados por la Casa Blanca se hablaba de la necesidad de concretar las condiciones de la tregua, tanto Moscú como Kiev consideran que el alto el fuego ya ha entrado en vigor.
Las partes también acordaron trabajar para declarar un alto el fuego en los ataques en el mar Negro que Rusia hará efectivo si le levantan algunas de las sanciones occidentales contra su sector agrícola.
Acciones y no palabras
Ucrania dijo este miércoles ante el Consejo de Seguridad de la ONU que frente a las negociaciones de paz indirectas que están actualmente en curso, "hay que mirar las acciones de Rusia y no sus declaraciones", y abogó por "una diplomacia apoyada en sanciones y presión sobre Moscú".
Con ello, la representante interina de Ucrania ante la ONU, Khrystyna Hayovyshyn, se refería a la continuidad de los ataques rusos contra objetivos civiles en Ucrania, que la propia ONU había presentado previamente como especialmente intensos en este mes de marzo, en palabras de la vicesecretaria general para Asuntos Humanitarios, Joyce Msuya.Hayovyshyn dijo que su país ha dado muestras de que desea la paz y está lista a "dar pasos concretos", pero advirtió: "No aceptaremos la paz a cualquier precio, una paz que anime al agresor a continuar sus ataques en el futuro".