Mikayla Raines, una influyente líder en la protección animal y fundadora de la organización Save A Fox, falleció trágicamente a la edad de 29 años. La noticia de su muerte ha conmocionado a sus millones de seguidores y a la comunidad digital internacional. Su esposo Ethan compartió el doloroso mensaje a través de las redes sociales, donde además denunció el acoso y las constantes agresiones en línea que Mikayla padeció durante años.
Una vida dedicada a los zorros
Mikayla Raines fue reconocida por su pasión y compromiso hacia el bienestar de los animales, centrándose especialmente en la rehabilitación de zorros. Con más de 500.000 seguidores en Instagram y 2,4 millones de suscriptores en YouTube, utilizó su plataforma para educar a las personas sobre la importancia del rescate y cuidado de estos animales exóticos. Fundó Save A Fox con el objetivo de rescatar, rehabilitar, y reubicar zorros que enfrentaban situaciones vulnerables.
Desde los 15 años, Mikayla comenzó su camino en el rescate animal, dedicando cada día de su vida a esta labor. Su esposo, Ethan, compartió un emotivo video de once minutos en el que resaltó que su vocación por los animales fue el eje de su existencia. En este sentido, describió cómo ella dedicó su tiempo no solo a rescatar zorros, sino que también ayudó a otros animales en peligro, como cuando asistió a "una tortuga mordedora a cruzar la carretera".
El costo del acoso en línea
Ethan reveló que, a pesar de los logros y el impacto positivo de Mikayla, ella enfrentó un continuo ataque de rumores falsos, insultos y hostigamiento virtual. Estos ataques afectaron profundamente su salud mental, que ya se encontraba comprometida por depresión, autismo y trastorno límite de la personalidad. En sus declaraciones, Ethan enfatizó que "luchó durante años por superar el dolor, pero esta vez fue demasiado".
El esposo de Mikayla hizo hincapié en los efectos devastadores del acoso en la vida de ella, describiendo que muchas de las agresiones en línea provenían de "celos y envidia". Para él, Mikayla era "una de las personas más desinteresadas" que conoció, ya que su motivación siempre fue ayudar a los animales, no buscar fama o provecho personal.
Tras la trágica pérdida de Mikayla, Ethan se comprometió a continuar su legado a través de Save A Fox. "Mikayla era, sin duda, la persona más inspiradora y asombrosa que he conocido, y su ausencia hace que todo se sienta vacío. Me siento destrozado", expresó Ethan con profundo dolor.
Mikayla Raines, quien nació el 5 de marzo de 1996, dejó una huella imborrable en el ámbito del rescate animal. Su organización se convirtió en la mayor entidad de rescate de zorros en Estados Unidos, y su trabajo resonó en muchas comunidades. La conmoción por su deceso se extendió entre organizaciones aliadas que han rendido tributo a su impacto, destacando la dedicación que tuvo hacia los animales y la comunidad. Desde la organización Juniper Wildlife Refuge, se publicó un mensaje que decía: "Esto es tan trágico. Muchos en nuestra comunidad tienen zorros que solo llegaron a nosotros por la dedicación de Mikayla a su misión y su empatía con los animales."
Mikayla Raines deja atrás a su esposo Ethan y a su hija Freya, creando un vacío inmenso en todos aquellos que reconocen el significativo legado que dejó en la lucha por los derechos y el bienestar animal.
