El nuevo paquete fiscal presentado por el presidente Donald Trump, conocido como el "gran y hermoso proyecto de ley", ha generado una intensa discusión en el ámbito económico y político.
Este ambicioso proyecto de ley incluye recortes fiscales significativos, la posibilidad de exenciones fiscales en propinas, recortes en programas sociales y gravámenes sobre remesas, todo con el objetivo de hacer permanentes los anteriores recortes aprobados durante su primer mandato.
Luego de ser aprobado por el Senado, el proyecto ahora regresa a la Cámara de Representantes para su votación final antes de que Trump pueda promulgarlo. Entre las propuestas más notables se encuentran:
- Consolidar los recortes fiscales que se implementaron entre 2017 y 2021, que se estima costarán al Estado entre 4 y 4,5 billones de dólares durante la próxima década.
- Una exención de impuestos en propinas de hasta 25 mil dólares al año para trabajadores hasta el año 2028, lo que beneficiaría a aproximadamente 4 millones de personas en el país.
- Recortes que afectarían programas sociales, incluyendo Medicaid, SNAP y Obamacare, con un recorte total estimado en 1,2 billones de dólares.
- Un impuesto del 1 % sobre las remesas superiores a 15 dólares que envíen no estadounidenses, en un contexto donde la tasa original planteada era del 3,5 %.
Recortes sociales y su impacto
Los recortes propuestos para abordar este significativo paquete fiscal tendrán un impacto directo en diversas ayudas sociales.
Esto implica que millones de personas podrían perder acceso a servicios vitales, como la atención médica a través de Medicaid y asistencia alimentaria bajo el programa SNAP.
Esta decisión ha suscitando preocupaciones sobre el bienestar de las comunidades más vulnerables en el país.
Adicionalmente, los recortes fiscales están incorrectamente diseñados para ser compensados por nuevas medidas como el impuesto a las remesas, lo que refleja una tendencia preocupante del gobierno de Trump hacia la comunidad migrante.
Esta actitud se considera una falta de apoyo hacia aquellos que dependen de las remesas para sostener a sus familias.
Defensa y seguridad fronteriza
Otra de las áreas que se beneficiaría de este nuevo paquete es el sector de la defensa y la seguridad fronteriza.
Según las estimaciones del proyecto, se destinarían alrededor de 175 mil millones de dólares adicionales en los próximos cuatro años para aumentar la seguridad fronteriza. Esto incluye la construcción de nuevos centros de detención y la implementación de tecnologías avanzadas de vigilancia.
Con el fin de facilitar estas medidas, el gobierno también ha presupuestado aproximadamente 150 mil millones de dólares adicionales para el sector de defensa, lo que representa un aumento del 13 % en relación al ejercicio anterior. De esta cantidad, se prevé que alrededor de 25 mil millones de dólares se destinen a la construcción de un sistema de defensa conocido como la "Cúpula dorada", destinado a reforzar la capacidad militar de respuesta ante amenazas externas, especialmente en el marco de la competencia con China y Rusia.
Sin embargo, el proyecto no ha estado exento de críticas. Especialistas han señalado que podría dar lugar a una carrera armamentista, lo que podría resultar en un incremento en los arsenales de países rivales que buscan superar las defensas propuestas por EE. UU.
Las preocupaciones se centran en que estos cambios no sólo impactarán el presupuesto federal, sino que también afectan a la estabilidad social y económica del país.
*Con información de EFE y apoyo de Inteligencia Artificial



