Un video que circula en redes sociales muestra el momento exacto en que el propietario de un negocio de bebidas alcohólicas, ubicado en la colonia La Florida, zona 19 de la ciudad de Guatemala, ataca a balazos a dos agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) que acudieron al lugar tras recibir una denuncia.
En la grabación, que rápidamente se hizo viral, se observa a los agentes conversando con el hombre que permanece sentado en un sillón dentro del local. Sin previo aviso, el sujeto desenfunda un arma de fuego y dispara directamente contra los policías, quienes intentan resguardarse del ataque. Segundos después, el agresor se levanta y sale tras ellos, aparentemente con la intención de continuar disparando.
El agresor fue abatido
Según el reporte oficial de la PNC, el atacante fue identificado como Widman Alfredo Sánchez, de 41 años, alias *"Diablo"*. Tras el ataque inicial dentro del negocio, los policías repelieron la agresión y se produjo un intercambio de disparos fuera del local.
En el enfrentamiento resultaron heridos los agentes Gerson Eleazar Rax Chun, de 28 años, y Rudy Alexander Cazun Ordóñez, de 32 años. Sánchez, alias "el Diablo", fue abatido y falleció al ingreso a un centro asistencial.
Las autoridades informaron que en el lugar quedaron dos chalecos antibalas pertenecientes a los agentes heridos y una pistola marca H-5-9 calibre 9mm, con su respectivo cargador, que estaba en poder del agresor. También se consignaron un vehículo marca Chevrolet con placas P-035BSH y una motocicleta Freedom modelo 2017, con placas M-514FHZ.
Antecedentes del agresor
La PNC indicó que el fallecido contaba con dos antecedentes por el delito de lesiones culposas registrados en 2007. A pesar de estos antecedentes, Sánchez mantenía la posesión de un arma de fuego y operaba un negocio que, según vecinos del sector, funcionaba a puerta cerrada y era conocido por constantes altercados.
El Ministerio Público llegó al lugar para realizar las diligencias correspondientes y recabar evidencia del tiroteo. Las autoridades investigan si el arma incautada estaba registrada legalmente y si el local contaba con los permisos requeridos para operar.
